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Mandela se recupera y respira por sus propios medios

30 de marzo de 2013

El Premio Nobel de la Paz y expresidente de Sudáfrica lucha contra una rebelde infección pulmonar, que parece estar superando.

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Imagen: Getty Images

En Sudáfrica lo consideran un padre, un ícono de la lucha contra la discriminación y un faro que ilumina los destinos del país. Por eso cada vez que la salud de Nelson Mandela se resiente, los cimientos de la nación cimbran y todo gira en torno a su recuperación. La prensa sudafricana dio muestras de eso en estas jornadas, centrando su atención en Mandela.

El expresidente y Premio Nobel de la Paz lucha contra una rebelde infección pulmonar que lo ha llevado en varias ocasiones de vuelta a los hospitales. Este sábado (30.03.2013), el líder antiapartheid de 94 años mostró evidentes señales de mejoría tras pasar tres noches en un centro médico de Johanesburgo.

La oficina del presidente Jacob Zuma informó a la prensa este mismo sábado que Mandela está a gusto en el recinto y que es capaz de respirar sin problemas y por sus propios medios, y que está respondiendo al tratamiento que los médicos determinaron para combatir una neumonia recurrente.

Se enfermó en la cárcel

El informe de Presidencia agrega que los médicos drenaron el exceso de fluido de los pulmones de Mandela, de forma tal de hacer frente a la infección que lo aqueja. "Esto ha resultado en que ahora es capaz de respirar sin dificultad. Sigue respondiendo al tratamiento", agregó el comunicado.

Los informes médicos previos desde que fue ingresado en el hospital el miércoles (27.03.2013) dijeron que estaba respondiendo bien y que conservaba el " buen ánimo". Debido a su delicada salud, "Madiba", el nombre con el que se le conoce en su tribu, se retiró hace años a Qunu, en el sureste del país.

Mandela se convirtió en el primer presidente negro de Sudáfrica después de ganar las primeras elecciones multirraciales del país, en 1994. Abogado, es admirado entre los suyos y en todo el mundo por liderar la lucha contra el racismo y por pasar 27 años en la prisión de Robben Island, apresado por sus ideas políticas. Desde entonces arrastra problemas pulmonares debido a una tuberculosis que contrajo mientras hacía trabajos forzados.

DZC (Reuters, dpa)