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Llega a los cines alemanes "Che el argentino"

12 de junio de 2009

La figura histórica del revolucionario argentino-cubano Ernesto “Che” Guevara, seguirá ocupando a historiadores y cineastas. En Alemania se exhibe la primera parte del díptico “Che el argentino”, de Steven Soderbergh.

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Che Guevara (Benicio Del Toro), fuma un puro con el camarada Camilo Cienfuegos.Imagen: picture-alliance/ dpa

Jean Paul Sartre dijo alguna vez que Ernesto Che Guevara era el hombre más hermoso y acabado de su época, aludiendo no sólo a que era uno que hacía y decía lo correcto, sino que también era alguien que encarnó el lado masculino y femenino –la suavidad y la dureza- de la revolución.

El médico e idealista revolucionario de barba y boina, que quedó inmortalizado en la célebre imagen de Alberto Korda, mientras observaba con expresión melancólica el paso de un cortejo fúnebre con los camaradas caídos en 1960, se ha convertido en un ícono, un mito aún más grande que Lenin, Mao y Castro, debido a su trágica muerte que ocurrió siendo joven y estando en pleno combate. Por eso sigue despertando interés y ocupando a historiadores y cineastas, sobre todo porque sigue habiendo muchos testimonios y personalidades que lo conocieron.

Benicio Del Toro als Che im gleichnamigen Film
El Che Guevara con la guerrilla en la Sierra Maestra.Imagen: Senator

Homenaje fílmico

La película “Che el argentino”, de cuatro horas de duración, es hasta ahora el homenaje fílmico más largo, dividido en dos partes, cada una de 131 minutos de duración. Bajo los títulos “Che el argentino” y “Che y la guerrilla”, se exhiben en los cines alemanes a partir del 11 y 23 de junio respectivamente. En la primera parte se relata el accidentado pero triunfal camino hacia la conquista del poder en Cuba, mientras que la segunda se aborda el fracasado intento por hacer la revolución en Bolivia siguiendo el ejemplo cubano.

La cinta, que fue exhibida en el Festival de Cannes 2008, en su extensión completa de 262 minutos de duración, tuvo una tibia acogida y no todo el público aguantó hasta el final. Soderbergh muestra a manera de documental la lucha poco espectacular y esforzada de la guerrilla en la Sierra Maestra, que después fue trasladada a Bolivia.

Benicio Del Toro als Che im gleichnamigen Film
El hombre más hermoso y acabado de su época, según Jean Paul Sartre.Imagen: Senator

Inicialmente Terrence Malick debía conducir la película y Soderbergh asumiría la producción. Al final, Benicio del Toro asumió la producción y Soderbergh dirigió el rodaje de la cinta. El actor puertorriqueño, según ha reconocido él mismo, pasó ocho años investigando todas las fuentes que pudieran acercarlo a la vida y obra del revolucionario, viajó de la Habana a La Paz y de Washington a Moscú. Visitó todos los lugares relevantes en la vida del Ché y entrevistó a todos los sobrevivientes.

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Franka Potente en el papel de Tamara Bunke.Imagen: Senator

Críticas de la prensa

La prensa alemana recibió la cinta con críticas. El semanario alemán Die Zeit, afirma que después de tanto esfuerzo y un costo de entre 40 a 60 millones de dólares, la película carece de dramaturgia y al no tener tensión, es plana. La actriz alemana, Franka Potente, (Corre, Lola, Corre) en el papel de la guerrillera germano-argentina Tamara Bunke, tenía un papel de un gran potencial que quedó reducido. Según el mismo rotativo un tono más narrativo tiene la recreación de una entrevista con una periodista estadounidense en 1964 que adopta un estilo documental de ficción en blanco y negro.

Como quiera que sea, Soderbergh retrata a una de las figuras más legendarias del siglo XX, que en ciertos sectores conservadores sigue estando rodeado de clichés y que incluso algunos consideran como un terrorista. Sobre todo en Estados Unidos, donde aún goza de incomprensión como lo demuestra la polémica surgida a raíz de que retiraran una estatua del revolucionario que presidió pocos meses una de las entradas al Central Park de Nueva York.

En Cuba en cambio, el Che Guevara se ha convertido en una figura omnipresente en el discurso oficial y algunos medios en Alemania se preguntan cuántos cubanos jóvenes están realmente conscientes de su legado. La Revolución Cubana ha perdido su brillo y nadie sueña con ser guerrillero.

Las camisetas con la imagen que tomó Korda se venden en el mundo entero. No le habría gustado al Che saber que niños en Tailandia son ocupados en su fabricación.

Autora: Eva Usi

Editor: José Ospina Valencia