Essen, de la “a” de Aalto a la “z” de Zollverein

“Yo conozco varias ciudades alemanas, pero, de todas ellas, Essen es la que más me gusta. Aquí consigo todo lo que necesito”, confiesa Zhai Xiaojing, una joven china que complementa sus estudios de filología alemana en Essen, la ciudad en el corazón de la cuenca del Ruhr, que combina su ímpetu urbano con el verde sosegado de sus afueras.

Zhai Xiaojing vive en una residencia estudiantil: “mi lugar preferido es la cocina porque es un espacio compartido; todas las noches cocinamos juntos y charlamos un rato”, dice ella, agregando que, si necesita relajarse después de estudiar, “los alrededores de nuestra residencia son muy verdes y tranquilos. ¡Son el sitio perfecto para pasear!”

Para tomar el sol: el Baldeneysee

En verano, los estudiantes se reúnen en la orilla del lago Baldeneysee o del río Ruhr para tomar el sol, hacer barbacoas o dar una vuelta en barquitos de pedales. Los paseos por el parque Villa Hügel o las rutas en bicicleta –como la RuhrtalRadweg, de 230 kilómetros de longitud– son otra alternativa para los días en que hace buen tiempo.

Quien esté interesado en conocer los alrededores de Essen puede planear excursiones a las ciudades cercanas sin temor a que el día se le quede corto. A los alumnos de la Universidad de Duisburgo-Essen la escapada les sale, además, barata: como todos los estudiantes de Renania del Norte-Westfalia, ellos reciben un boleto NRW que les permite usar el transporte público (metro, bus y tren de cercanías) de todo el estado federado.

Tras las huellas de la cultura industrial

Los amantes del arte disfrutarán visitando la Cámara del Tesoro de la catedral de Essen, ubicada en el centro de la ciudad, el Museo Folkwang o la Villa Hügel, en donde se organizan exposiciones con regularidad. Los que prefieran conocer mejor el pasado industrial de la región deberían aprovechar la oportunidad que ofrece la Zeche Zollverein, una mina de carbón inactiva convertida en complejo cultural que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2001 y es sede de un museo importante. El mismo es una parada obligatoria en la llamada “Ruta de la Cultura Industrial”, que se extiende a lo largo de la cuenca del Ruhr.

También los apasionados del séptimo arte encontrarán razones para enamorarse de Essen. Aparte de contar con el múltiplex más grande de Alemania, un sinfín de pequeños y fascinantes cines de la primera mitad del siglo XX se reparten por toda la ciudad. Como muestra un botón: inaugurada en 1928, en la sala Lichtburg se sigue desplegando la alfombra roja cada vez que se celebra un estreno. En lo que a la ópera y al teatro se refiere, siempre hay algo que ver en alguna de las siete tarimas de la ciudad, en la Filarmónica o en la casa de la ópera de Aalto. La sala de eventos más grande de Essen es el pabellón Gruga, en el que han tocado hasta los Rolling Stones.

Un café en la “casa imperfecta”

Un extraño pero concurrido local, sitio de encuentro predilecto de muchos estudiantes, es la Unperfekthaus: la casa imperfecta. Inaugurada en 2004 en el centro de Essen, en ella se puede beber todo el café o la cola que se quiera, surfear en Internet o contemplar las obras exhibidas en sus numerosas galerías – todo está incluido en el módico precio de la entrada. Ese es el lugar ideal para que los estudiantes extranjeros conozcan gente nueva y se familiaricen con la escena artística alternativa de la ciudad.

Autor: Svenja Üing

Editor: José Ospina