Arabia Saudí: Mujeres irán a las urnas
11 de diciembre de 2015
La Deutsche Welle ha intentado contactar a activistas de derechos humanos de la sociedad civil saudí para hablar sobre las elecciones. Pero fue inútil: las autoridades locales les prohibieron pronunciarse públicamente al respecto.
No obstante, los medios locales se ocupan con el tema desde hace ya meses. Allí toman la palabra también las candidatas. Una de ellas es Farida Mohammed Ali Farsi, quien pertenece al comité de colegios femeninos de la Cámara de Comercio de Dschida. “Se espera que con la participación femenina el rendimiento del Consejo mejore”, afirmó el periódico Al-Riad a principios de agosto.
Elecciones con valor simbólico
La comunidad internacional ve las cosas distintas. La antropóloga de religión Madawi Al-Rashid habló con Deutsche Welle sobre el significado restringido de dichas elecciones. “Los concejos municipales casi que no tienen poder político”, dijo Al Rashid. “Solo se podrá hablar del poder femenino cuando mujeres estén representadas en muchas instituciones relevantes y con sus reivindicaciones contribuyan a reformar el sistema. De eso estamos lejos aún”, añadió.
El Estado saudí sigue sin reconocer irrestrictamente el rol de las mujeres en las esferas públicas. Esto también repercute en las elecciones municipales. Algunas candidatas fueron rechazadas sin declarar los motivos.
Un avance
A pesar de las objeciones, las elecciones representan para muchas mujeres un gran paso. “Los Consejos municipales son instituciones en las que ciudadanos llegan con sus peticiones. Ahí se solucionan los problemas. Por ende es importante que ahora las mujeres puedan tener influencia en problemáticas concretas”, citó el periódico Al-Riad a la vocera de una asociación de mujeres.
Para la publicista y activista Faud Ibrahim la participación femenina en las elecciones es a fin de cuentas un avance. Por un lado demuestra como las mujeres han luchado por sus derechos políticos. Por otro lado contribuye a llevar esta lucha un paso más adelante. No obstante, advierte la activista: este cambio no se puede ver como una señal de la nueva dirección política de la casa real. Todo lo contrario, aún con el sucesor del rey Abdullah, el rey Salman, se conserva un liderazgo muy conservador. “Hay que seguir adelante en la búsqueda de la democracia”, dijo Ibrahim.