África Occidental: el debate por una moneda única

En Abuja, la capital de Nigeria, los jefes de Estado de la Comunidad Económica de África Occidental (CEDEAO) han confirmado su voluntad de crear una moneda común. Después de la cumbre de un día, el sábado por la tarde, Mahamadou Issoufou, Presidente de Níger y nuevo Presidente de la CEDEAO, subrayó que la hoja de ruta para la introducción de la nueva moneda debe ser respetada.

Se está debatiendo que con miras al año 2020, pero aún queda mucho por hacer. "Esto se refiere a los criterios de convergencia de nuestras economías", dijo Issoufou. Los países que cumplen los criterios de convergencia deberían comenzar el proceso. El nombre de la nueva moneda es Eco. 

Se aprobaría la moneda única en un comienzo en los países francófonos donde se utiliza el franco CFA.  En el pasado, por ejemplo, en Senegal y Benín se produjeron protestas contra el franco CFA, cuyo tipo de cambio está vinculado al euro. Con su propia moneda, los países de África Occidental tendrían la posibilidad de poner fin a su dependencia financiera de la antigua potencia colonial Francia, según el punto de vista de los críticos.

No más pérdidas al cambiar dinero 

En Malí, Etienne Fakaba, economista y director del Centre de Recherche d'Analyses Politiques Economiques et Sociales (Centro de Investigación Política, Económica y Social), es un defensor de Eco. La razón de ello es el gran mercado en la zona de la CEDEAO. Con una moneda común, se podrían realizar ahorros ya que no sería necesario realizar cambios de moneda. "En última instancia, creceremos juntos hasta convertirnos en una entidad más fuerte, también a nivel económico", predice. Para que el nuevo Eco se convierta en una moneda fuerte, también se necesita un plan político. "De esta manera, la esfera de influencia puede ampliarse", dice Fakaba.

Mucho menos entusiasmo se puede sentir en Nigeria, el país más grande de África Occidental, con alrededor de 200 millones de habitantes. "Los nigerianos no lo están discutiendo. De vez en cuando se oye algo sobre las élites", dice Eze Onyekpere, director del Centro para la Justicia Social, quien sigue siendo escéptico en cuanto a si la moneda única se convertirá en algo real en un futuro cercano.

Aplicación de las ideas de los fundadores de la CEDEAO

Pero Solomon Jamiru, Viceministro de Información de Sierra Leona, no cree que Nigeria vaya a bloquear la introducción de Eco. "Independientemente del tamaño y la población de Nigeria, el país está muy dispuesto a hacerlo. Estamos trabajando juntos", dijo al margen de la reunión. Esto también estaba en el espíritu de los padres fundadores de la organización regional. "Después de todo, la CEDEAO trata de la integración económica regional. En última instancia, esto no puede lograrse sin la moneda", añade.

Sin embargo, Hassan Musa, que trabaja como cambiador de dinero móvil no puede disfrutar mucho de los planes. Cuando se le pregunta qué piensa de una en lugar de siete monedas diferentes, responde: "No nos gusta hablar de ello. Afectará a nuestro negocio". 

Urgente disciplina financiera

Pero hay otras razones para el escepticismo, especialmente en Nigeria. Los países de África Occidental son muy diferentes, según Yves Ekoué Amaïzo, quien viene de Togo y es director del grupo de reflexión sobre el afrocentrismo. "Los empresarios nigerianos son muy dinámicos. No quieren nada que pueda interrumpir su producción. Después de todo, está claro que el CFA no ha contribuido en nada a la industrialización de África", argumenta.

Para Amaïzo se necesita urgentemente un debate sobre la disciplina financiera. "Cada país es responsable de esto. De lo contrario, no es aceptable". Pero antes de entrar en detalles, según el experto en divisas Eze Onyekpere, es necesario aclarar cuestiones mucho más fundamentales. "Es necesario armonizar otras áreas. No se puede introducir una moneda única sin armonizar las políticas fiscales, industriales, comerciales y laborales". Por lo tanto, parece poco realista que sea posible pagar con el Eco en un futuro inmediato. Yves Ekoué Amaïzo también se muestra escéptico: "La fecha ya ha sido cambiada cuatro veces. Una vez más, tampoco sería una catástrofe en África".

(dg/cp)

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