Volver a la historia
22 de junio de 2008Alemania respeta a Turquía, pero siente que está a sólo un paso de luchar por un triunfo histórico, 12 años después de su último título.
"Ya es hora de volver a hacer historia", dijo el entrenador de arqueros de la selección alemana, Andreas Köpke, protagonista en la Eurocopa 96 del último título alemán.
Ya el miércoles la historia entrará en juego, porque alemanes y turcos volverán a enfrentarse en un gran torneo, y lo harán nada menos que en Suiza, escenario del "milagro de Berna" con el que la Alemania de Fritz Walter ganó el Mundial de 1954.
Aquella vez Alemania se impuso dos veces a Turquía: 4-1 en Berna y 7-2 en Zúrich.
La "generación Ballack"
A 54 años de aquel éxito, la "generación Ballack" no piensa de ninguna manera en terminar su camino en la semifinal del miércoles en Basilea.
"Trabajamos dos años para esto, y ahora queremos lograrlo", enfatizó el defensa Arne Friedrich.
Muchos jugadores alemanes esperaban más bien una revancha por la derrota en la primera fase ante Croacia, una revancha que incluso deseaban. Pero en la noche del viernes se quedaron con la boca abierta cuando, en sus habitaciones del hotel "Giardino", vieron la remontada de los turcos.
"Los turcos tienen esa cualidad de dar vuelta las cosas en el tiempo suplementario. Sólo están rendidos cuando se sientan en el autobús", analizó impactado Thomas Hitzlsperger.
Esa gran fuerza mental de los turcos es "el mayor peligro" para Alemania, advirtió Friedrich. "No se los puede descartar nunca".
Christoph Metzelder coincidió con su compañero al expresar "respeto" por un equipo que definió como "enloquecido e imprevisible", pero cree tener la fórmula para ganar: "Tenemos que imponer desde el principio nuestro fútbol de potencia física, no van a resistir nuestra presión".
"Somos otra vez favoritos", insistió Friedrich, que tiene muy en cuenta las bajas del rival: tras su segunda amarilla no estarán Tuncay, Arda ni Emre Asik, en tanto que el arquero Volkan Demirel arrastra dos partidos de suspensión. "Son jugadores muy importantes los que faltan".
Día de asueto
Joachim Löw, entrenador alemán, le dio día libre a sus jugadores, que en vez de practicar fútbol se entretuvieron con un programa que incluyó tenis, waterpolo, ciclismo y yoga como posibilidades.
"Pero a partir de este domingo sólo pensaremos en Turquía", recalcó Köpke, que no quiere ningún tipo de relajación. El objetivo es demostrar lo de siempre: Alemania es una selección que crece en los grandes torneos. Si pasa a la final, esa fama se acrecentará.