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Terapia de shock para fumadores

Bernd Riegert23 de octubre de 2004

Estremecer es lo que busca la nueva campaña contra el tabaco, basada en impactantes imágenes de pulmones tiznados, ulceraciones y otros horrores, que acaba de presentar el comisario de Salud de la UE.

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Imágenes que lo dicen todo...Imagen: AP

Las imágenes dicen más que mil palabras. Y, en el caso de la nueva campaña de la Unión Europea contra el hábito de fumar, no sólo lo dicen, sino que lo gritan: ¡el tabaco produce enfermedades y muerte! Miedo, repulsión e irritación provocan las fotos que han de imprimirse en los paquetes de cigarrillos, donde actualmente se leen advertencias de similar contenido.

Jóvenes en peligro

Hasta ahora, los esfuerzos por inducir a los jóvenes a no caer en las garras del tabaco o a abandonarlo no han sido precisamente un éxito. Cada vez son más los chicos que fuman. Según el comisario de Salud de la Unión Europea, David Byrne, si bien el número global de fumadores va en descenso en la mayoría de los países del viejo continente, no ocurre lo mismo en el caso de los jóvenes y las mujeres.

La tendencia inquieta a Bruselas. Y con razón: aproximadamente 650 mil personas mueren anualmente como consecuencia de la adicción al tabaco. ¿Cómo poner coto al problema? En casi todos los estados miembros de la UE se ha restringido la publicidad de cigarrillos. Algunos incluso la han prohibido por completo. Otros han llegado más lejos, como Irlanda, donde se prohibe fumar hasta en bares y restaurantes. Suecia se dispone a seguir el ejemplo.

Impacto emocional

EU-Kampagne gegen das Rauchen
Disuasión visual.Imagen: AP

Como eso no ha sido suficiente, se recurre ahora al impacto emocional de las fotografías. Pulmones tiznados, adolescentes impotentes, ulceraciones y tumores forman parte del arsenal de imágenes con que la Unión Europea se lanza a esta nueva batalla, con la esperanza de terminar ganando la guerra contra el tabaquismo. Cada país podrá decidir si las imprime en los paquetes de cigarrillos o no.

Pese a los enormes costos que supone el tratamiento de las víctimas de la nicotina, evaluados en unos 100.000 millones de euros al año, algunos siguen reacios a dar una batalla cabal contra la poderosa industria tabacalera. En Alemania, el impuesto al tabaco reporta anualmente 14 mil millones de euros anuales. Por otra parte, el negocio sigue floreciendo a nivel mundial, con la incorporación de nuevos mercados: el Europa del este y Asia se venden ahora más cigarrillos que nunca.