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Sindicato chileno presenta nueva querella contra Pinochet

EFE/DW6 de mayo de 2005

El ex dictador chileno Augusto Pinochet se enfrenta de nuevo a una querella por violación de los derechos humanos. La querella acusa al dictador y su presidente del interior Sergio Onofre Jarpa.

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Augusto Pinochet
Augusto Pinochet se enfrenta a una nueva querella.Imagen: AP

El mayor sindicato chileno presentó hoy una querella contra el ex dictador Augusto Pinochet y el ex ministro del Interior Sergio Onofre Jarpa por una matanza de 26 opositores a la dictadura en 1983. La acción legal presentada ante la Corte de Apelaciones por el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de Chile (CUT), Arturo Martínez, y patrocinada por el abogado Adil Brkovic va dirigida además contra todos aquellos que resulten responsables en

calidad de autores, cómplices o encubridores de los mismos delitos.

Brkovic dijo que los delitos que se imputan no han prescrito puesto que se está invocando la figura penal del crimen de lesa humanidad, que -dijo- "es un delito que está fundado en el derecho internacional".

Los querellantes establecen que existen antecedentes suficientes para inculpar a Onofre Jarpa como responsable de la orden para reprimir a los trabajadores. La CUT asegura que en esa manifestación 18.000 efectivos militares ocuparon las calles con el objetivo de reprimir y

posteriormente culpar a los convocantes: la Confederación de Trabajadores del Cobre y el Comando Nacional de Trabajadores. Según la demanda, "el despliegue de fuerzas perseguía acrecentar el miedo en la población civil", sometida además a masivos allanamientos.

En las protestas contra la dictadura entre 1983 y 1985 murieron más de un centenar de personas y un millar resultó herido, mientras que en los registros policiales están consignados más de 7.000 detenidos. Esta es la segunda querella por violaciones de los derechos humanos que enfrenta Jarpa, un destacado político derechista quien señaló hace unos días que en esa fecha el país estaba bajo estado de sitio y afirmó que "cuando se enfrentan situaciones extremas, siempre hay excesos". A mediados de 1983, se inició en Chile una ola de crecientes

protestas y manifestaciones callejeras que condujeron a que Pinochet aceptara la realización de un plebiscito, en octubre de 1988, en el que el electorado rechazó la aspiración del militar de gobernar durante otros ocho años.