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¿Será expulsado Irán de Siria?

Maryam Ansary
5 de septiembre de 2018

Turquía, Rusia e Irán se disponen, de nuevo, a hablar sobre el futuro de Siria este 7 de septiembre. Pero esa unidad tiene grietas. Muchas cosas indican que Irán podría salir como el perdedor.

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Ataques aéreos rusos sobre Idlib, este 4 de septiembre de 2018
Ataques aéreos rusos sobre Idlib, este 4 de septiembre de 2018Imagen: Getty Images/AFP/O. H. Kadour

En Siria, se prepara la ofensiva final de las tropas de Assad contra sus enemigos, con el apoyo de sus aliados, Rusia e Irán. El masivo ataque será lanzado contra el último bastión rebelde, en la provincia de Idlib en el noroeste, fronteriza con Turquía. Ante la aparente inminencia de la confrontación, Washington ya advirtió a Assad sobre el uso de armas químicas. En todo caso, se teme un baño de sangre porque los rebeldes no tienen espacio para retirarse. Casi tres millones de personas viven en dicha provincia.

Turquía, un actor extranjero importante en el conflicto sirio, ha advertido sobre el ataque, por razones humanitarias, e intereses propios. Primero, apoya a algunos de los grupos rebeldes que no forman parte del círculo de Al Qaeda. Por otro lado, Turquía teme una desbandada de refugiados que busquen amparo en su territorio. Y, por último, quiere consolidar su influencia en el norte de Siria, como en la provincia kurda de Afrin, donde Turquía ha instalado puestos militares.

Irán teme pérdida de influencia

Irán, aliado de Assad, también está preocupado por su papel en Siria después de la caída de Idlib. Justo antes de la próxima Cumbre de Irán-Turquía-Rusia, este viernes 7 de septiembre en Teherán, Irán envió a funcionarios gubernamentales de alto nivel a Damasco. Según Amir Hatami, ministro de Defensa de Irán, Teherán acordó con Damasco una cooperación militar que prevé su presencia permanente y la participación de Irán en la reconstrucción de Siria.

Estos objetivos no son realistas, explica a DW Habib Husseinifar, periodista y conocedor del Medio Oriente: "Israel, Arabia Saudita y Estados Unidos están presionando a Irán para que abandone Siria o reduzca su influencia allí. Si Idlib es tomado por Damasco, la presencia de Irán ya no será relevante, así que Rusia y Siria tendrán que repensar el papel de Irán".

Rusia (aún) depende de Irán

Rusia e Irán han asegurado, hasta ahora, la supervivencia de Assad. Al mismo tiempo, Rusia está expandiendo sus relaciones con Israel, que a su vez insiste en que Irán se retire de Siria. ¿Cuál será entonces la postura de Moscú frente a la presencia continua de Irán en Siria?

"Rusia quiere evitar que Irán fortalezca su posición en Siria, ya que se están convirtiendo en competidores. Al mismo tiempo, Rusia tiene poco interés en desplazar completamente a Irán de Siria como actor militar, porque algunas unidades de las fuerzas armadas de Rusia en Siria dependen del apoyo de las fuerzas terrestres iraníes y pro-iraníes", cuenta a DW Margarete Klein, experta en Rusia y política de seguridad de la Fundación Ciencia y Política (SWP). "La estrategia de Moscú en Oriente Medio se basa en mantener buenas relaciones con casi todos los actores", dice la experta de SWP y concluye que "Moscú busca que Irán se retire del sur, región fronteriza con Israel, al tiempo que tolera ataques militares de Tel Aviv contra posiciones iraníes en Siria".

Irán se debilitó en Siria

Husseinifard cree que el final previsible de la guerra no deja lugar para el ejercicio del poder militar iraní, y que los días de la Guardia Revolucionaria en la guerra siria están contados. Y Siria, a su vez, no va a ser capaz de iniciar la reconstrucción, hasta que Irán no salga de Siria, porque "para Estados Unidos e Israel la retirada de Teherán es una condición prioritaria para la ayuda financiera, y la restauración de la soberanía. Para ello, Siria necesitaría unos mil millones de dólares, algo que sobrepasa las capacidades de Siria e Irán. En conclusión: Occidente estaría dispuesto a ayudar a Siria y promover el regreso de los refugiados, solo si se distancia de Irán.

Para Turquía, por su parte, el tercero en las conversaciones de Tabriz este próximo viernes, el problema kurdo es lo más importante. Ankara espera que los kurdos en las áreas fronterizas sirias se debiliten y que su presencia militar en las áreas kurdas sea lo más duradera posible. Así las cosas, a Turquía también la favorecería que Irán salga de Siria.

Maryam Ansary (jov/er)