Salud con sazón
Las especias no solamente dan un empujón a nuestra comida, sino también a nuestra salud. No necesariamente tienen que ser exóticos. La mayoría se encontrará en su nevera.
Ajo contra la hipertensión
Es posible que algunas personas detestan el ajo, debido a su fuerte y (persistente) sabor. Pero las sustancias vegetales secundarias, que son responsables para este sabor típico, son un beneficio para el cuerpo. Quien come ajo, al mismo tiempo rebaja su presión sanguínea y previene la trombosis. El ajo actúa como protector celular, a través de su alta concentración de antioxidantes.
Tomillo contra la tos
Hay más de 200 especies diferentes de tomillo. Lo que se usa más frecuentemente es el “tomillo verdadero”. El ácido del rosmarino que la planta contiene rebaja el nivel de colesterol. Tradicionalmente se usa el tomillo para combatir resfriados. En forma de jarabe contra la tos tiene un efecto expectorante y espasmolítico.
Canela apoya al metabolismo
La canela acelera el metabolismo. Pero hay un problema: la cumarina. La canela cassia contiene más de esa sustancia aromática que la canela de Ceylán, también llamada “canela verdadera ”. La cumarina podría causar daños del hígado en personas sensibles. Los científicos todavía no ha probado suficientemente que la canela rebaje el nivel de glucemia de pacientes de diabetes del tipo 2.
El azafrán tiene un efecto positivo en la psique
Quién quiere añadir los caros hilos del azafrán a su surtido de especias, disfrutará también de su saludable efecto. Diversos estudios revelaron que el azafrán tiene un efecto positivo en la psique y ayuda a combatir la depresión. Oler la especia podría ayudar a aliviar los síntomas típicos del síndrome premenstrual (SPM). El azafrán es también un afrodisíaco. Al menos para las ratas macho.
Anís contra los dolores de barriga
Aunque el anís y el anís estrellado (en la imagen) no son parientes, contienen el mismo tipo de aceite etéreo que provoca un olor característico a regaliz e hinojo. El anís está conocido como planta digestiva, elimina los gases intestinales y las molestias que estos producen. Ambas raleas de anís tienen un efecto antiinflamatorio.
Jengibre contra las inflamaciones
En referencia a su sabor hay diferentes opiniones. Pero nadie pone en duda el efecto benéfico de la raíz en referencia a un incipiente resfriado. En la medicina china y ayurveda el jengibre está usado tradicionalmente en contra las inflamaciones, como la reuma o la artrosis. Además el bulbo disfruta de antioxidantes y aceites etéreos, que tienen un efecto sedante.
Cúrcuma contra todo
La cúrcuma forma parte del curry en polvo. Se le adjudican cinco efectos saludables al mismo tiempo: rebaja el nivel de colesterol, tiene un efecto antioxidante y ayuda contra las inflamaciones. Además cohíbe al cáncer. También podría reducir el riesgo de alzhéimer porque ralentiza las alteraciones del cerebro debido al envejecimiento.