Montar un reloj implica la máxima precisión y requiere formarse para ello durante años. La empresa Schäuble&Söhne de Karlsruhe ofrece desde 2006 cursos de montaje de relojes a habilidosos y aficionados. Los participantes aprenden a desarmar las 48 piezas de un mecanismo y volver a montarlas. Al final, se llevan a casa un reloj montado con sus propias manos.