Cómplices políticos del principal traficante de fentanilo
7 de febrero de 2023La justicia italiana comenzó a seguir los pasos de José Ángel Rivera Zazueta, alias "El Flaco”, en enero de 2019, gracias a una persona que fue contactada para que ayudara a traficar cocaína de Sudamérica a Sicilia, quien, en vez de convertirse en cómplice decidió denunciar a tiempo a las autoridades. Jamás hubiera imaginado la Policía italiana que, cuatro años después, "El Flaco” se habría convertido en uno de los principales traficantes de fentanilo a Estados Unidos.
A través de sofisticados métodos de interceptación autorizadas por un juez, la policía estuvo interceptando durante más de seis meses las comunicaciones del "Flaco” y sus cómplices. Así consta en el expediente judicial 1337/2020 de la Dirección Distrital Antimafia de la Procuraduría de la República en Catania, del cual tengo copia. (Abajo en este artículo Ud. puede descargar la copia del expediente judicial).
Gracias a esto quedó registrado en las transcripciones que "El Flaco” es miembro del Cartel de Sinaloa y es uno de los operadores más cercanos de Ismael Zambada García, alias "El Mayo”, el principal dirigente del Cartel de Sinaloa, organización criminal mexicana con presencia en más del 60 por ciento del planeta.
A lo largo de meses de investigación, el gobierno de Italia ubicó a Rivera Zazueta como el segundo hombre más poderoso dentro del Cartel de Sinaloa. Se le atribuye una capacidad de tráfico de cocaína de Sudamérica a México de 17,5 hasta 28 toneladas mensuales.
Aunque algunos medios de comunicación y periodistas ya han contado algunos detalles de la investigación hecha en Italia, bautizada como la "Operación Halcón”, hay varios detalles aún no revelados. Por ejemplo, que en 2019 y 2020 los gobiernos de Colombia y Estados Unidos fueron notificados de la existencia del "Flaco” y participaron en algunas fases de la investigación. Aunque fue apenas el 30 de enero de este año que el gobierno americano dio noticia de la existencia de Rivera Zazueta y lo señaló como uno de los principales traficantes de fentanilo a ese país, la DEA tuvo conocimiento de sus actividades criminales desde septiembre de 2019 en Taiwán, donde monitoreó las reuniones con sus socios.
"El Flaco”, un hombre ostentoso
Luego del pitazo, la policía italiana introdujo a un agente italiano que trabajó bajo cobertura en la operación criminal de Rivera Zazueta bajo el nombre falso de Marco Trovato.
En junio de 2019 comenzaron a ser registrados los primeros encuentros entre "El Flaco” y sus cómplices en Sicilia. Todo giraba en torno a poder transportar desde Sudamérica 1,5 toneladas de cocaína a Catania, la cual sería vendida a la Ndrangheta, una organización criminal de Calabria, considerada una de las distribuidoras más importantes de cocaína en Europa. Trovato fingía ser uno de los que estaba dispuesto a colaborar en lograr que la droga llegara a Catania y fuera descargada sin problemas.
En los viajes de negocios, Rivera Zazueta era acompañado de una mujer llamada Karla Daniela Ramírez Pérez, de 27 años de edad. El operador de "El Mayo” era un ‘turista mundial'. Viajaba constantemente entre los continentes de América, Europa y Asia.
Contrario al bajo perfil que le gusta a "El Mayo”, "El Flaco” prefiere el lujo. En Catania llegaba a hospedarse, acompañado de Karla Daniela, al fastuoso hotel Romano Palace, ubicado en la playa.
"Ciento cuatro habitaciones de lujo, cada una con un color y panorama diferente, preciosos baños decorados con mosaicos y piedras preciosas, ¡toda la más moderna tecnología y soportes multimedia combinados con el máximo lujo para su estadía 5 estrellas!”, anuncia la publicidad del complejo hotelero. "Desde las cómodas y amplias terrazas, impresionantes vistas del Etna combinadas con los embriagadores aromas del mar y los jardines del hotel, para unas vacaciones que son una experiencia sensorial esencial”, continúa. Pero lo del "Flaco” en Catania no eran vacaciones, sino negocios de droga.
Poco cauteloso, Rivera Zazueta, en vez de tratar de ocultar su identidad, se registró en el hotel con su pareja usando sus pasaportes auténticos. Así, el gobierno de Italia conoció su identidad.
"El Flaco” explicó a sus cómplices que utilizarían aviones privados para el tráfico de la cocaína, ya que, aunque habitualmente utilizaban aviones que salen de México, por desgracia no había compañías interesadas en hacer vuelos directos a Catania. Afirmó que el piloto que tripularía el avión sería uno experimentado que ya había trabajado para Joaquín Guzmán Loera, "El Chapo”.
El primer encuentro entre Rivera Zazueta con el agente encubierto ocurrió en el restaurante La Saliera, en Roma, donde el platillo emblema es la pasta cacio e pepe y la famosa carbonara. Ahí estuvieron presentes dos cómplices de la operación: Daniel Esteban Ortega Ubeda y Felix Rubén Villagrán López, los dos originarios de Guatemala.
El enviado de "El Mayo” quería poder establecer una ruta en la que pudiera traficar hasta 1,5 toneladas de cocaína desde Colombia hasta Sicilia, pero primero haría un test de la ruta con un cargamento de 300 kilos de la droga.
El proveedor de la cocaína era un exguerrillero de las FARC apodado "El abuelo”. "El Flaco” envió a Matías Juan Amici Gómez, un panameño de su confianza, a Colombia, para cerciorarse de que realmente el proveedor tenía la capacidad de producir la droga que necesitaba. "El Abuelo” presumió al emisario que tenía "mucha cocaína disponible”.
Los encuentros fueron registrados por el gobierno de Colombia, que se sumó a la operación de inteligencia del gobierno de Italia.
A cambio de su ayuda de proveer la cocaína, además del pago económico, "El abuelo” buscaba poder adquirir armas en Europa para enviarlas a Ecuador, donde "El abuelo” aseguró que controlaba dos de los principales puertos para el tráfico de droga.
Estados Unidos conocía las operaciones del "Flaco” desde 2020
Como mencioné antes en este artículo, el gobierno de Estados Unidos señaló a José Angel Rivera Zazueta como un importante miembro del Cartel de Sinaloa, y uno de los principales traficantes de fentanilo a ese país, en enero de 2023, pero, en realidad, tuvo noticia de sus operaciones criminales desde 2019.
Fue gracias a la investigación iniciada por las autoridades italianas que el gobierno de Estados Unidos supo de Rivera Zazueta. La primera intervención de la agencia antidrogas DEA en la "Operación Halcón” fue en septiembre de 2019 en Kaohsiung, Taiwán. Dieron seguimiento a una reunión del "Flaco” con uno de sus cómplices, llamado José Fabricio Martino García, originario de Panamá y con residencia en Trento, Italia.
El operador de "El Mayo” dio instrucciones para que se terminara de coordinar el envío de la droga a Catania y se comprometió a que, cuando esta llegara, él estaría allí personalmente. Mientras tanto, él iba a permanecer en China y Vietnam.
A través de las conversaciones grabadas al "Flaco” de las cuales tengo la transcripción, se supo que, al inicio, este actuaba como un hombre de negocios, paciente pero enérgico. Buscaba una operación rápida y de gran volumen de droga "para evitar pérdida de tiempo”, "¡Debe ser una cosa veloz!” exigía a Martino García, a quien le decía "tocayo”.
Durante varios meses, por distintas razones, el envío se fue retrasando, y con ello se fue agotando la paciencia del "Flaco”. Cuando finalmente la droga llegó a Catania, en enero de 2020, Martino García llamó a Rivera Zazueta entusiasta para informarle: "¡Flaquito! ¿Cómo está usted y su familia?”, lo saludó. Rivera Zazueta dijo que se encontraba en ese momento en Cancún, Quintana Roo, México.
Como parte de la investigación italiana, hubo coordinación con los gobiernos de Colombia y España para dejar transitar la droga, y así poder capturar a Rivera Zazueta y a sus cómplices con las manos en la masa.
Para no perder detalle de la operación de tráfico de droga, la policía italiana puso micrófonos en los automóviles, habitaciones de hotel y hasta en los restaurantes en los que el grupo criminal se reunía. Los espiaron hasta en la sopa, literalmente.
"El Flaco” y sus contactos con la Guardia Nacional en México y políticos
Un cargamento de casi 400 kilos de cocaína llegó al aeropuerto de Catania en un vuelo de Iberia que venía de Bogotá, con escala en Madrid y en Roma. De éste último punto, la droga fue trasladada en un vuelo de Alitalia a Catania.
La droga fue trasladada a un departamento en el segundo piso de Vía del Popolo número 28, cerca de Catania. El 12 de enero de 2020 llegaron al lugar donde estaba la mercancía Martino García, su cómplice Daniel Esteban Ortega Ubeda, Amici Gómez y el policía infiltrado. Los paquetes de cocaína estaban apilados en una pared, cubiertos por una cobija.
Ortega Ubeda dijo a Martino García que le daría 32 kilos de cocaína. El agente encubierto exclamó "¡Treinta y dos! ¡La compensación es mejor que el pago!”, celebró Martino García.
La última fase de la trama era que otro cómplice se reuniera con Martino García y Ortega Ubeda en Catania para realizar el transporte de la cocaína a diversos puntos de Italia para los compradores finales. Pero el asociado no definía un día ni una hora específica, lo cual hizo enfurecer al "Flaco”.
"¿Puedes llamarle para saber que está pasando?, ¿Por qué no ha llegado?, ¡Estas son pendejadas! ¡¿Qué cosa está pasando!? ¡Mentiroso!”, grito por teléfono Rivera Zazueta a Ortega Ubeda, enfurecido.
El socio informal era Felix Rubén Villagrán López, de origen guatemalteco, quien estaba en Madrid. Cuando Ortega Ubeda llamó de nuevo a su jefe, "El Flaco”, para decirle que finalmente Villagrán López iba a llegar, este profirió maldiciones: "¡Es una mierda, eso es lo que es, no se puede decir de otra forma! ¡Es una falta de respeto!”.
Finalmente, Villagrán López se reunió, el 13 de enero de 2020, con Martino García, Ortega Ubeda, el policía infiltrado y Matías Juan Amici Gómez en el restaurante "Antigua Sicilia”, en Catania, un lugar con especialidades de pescados y mariscos, ubicado en el centro histórico de la ciudad, enclavada en el Mediterráneo.
El gobierno de Italia tiene las grabaciones de las conversaciones sostenidas durante la cena y la sobre mesa. Villagrán López, quien afirmaba conocer muy bien al "Flaco”, contó pormenores que ahora tienen mayor relevancia al comprender mejor el nivel criminal de Rivera Zazueta y su posición en el Cartel de Sinaloa.
Villagrán López aseguró a los otros cómplices que "El Flaco” tiene buenas conexiones a todos los niveles de gobierno, en 2020 ya en la administración del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
"…Hablan de un político mexicano. Hablan de ´El sordo´, el mexicano que está actualmente en la Guardia Nacional (en México). Hablan de ´El Flaco´ y sus mujeres. Una de ellas es la nieta de Amado Carillo el ´Señor de los cielos´. Hablan de Arturo Beltrán (ex ocio de ´El Chapo´ y ´El Mayo´)”, se afirma en la transcripción que forma parte del documento judicial.
Cuando comienzan a comer, sueltan más la lengua. Villagrán López se explaya en hablar más del "Flaco”: "Pasan de 2 a 3 toneladas a la semana…al mes. El papá del ´Flaco´ administraba 20 mil casas de cambio y tenía contactos con la CIA”.
Eso podría explicar porque actualmente "El Flaco” tiene su propio centro cambiario en México: Mia Centro Cambiario, creado en 2011, y que ha operado desde entonces con el aval de las instituciones financieras en los sexenios de Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto y ahora, el de AMLO.
"Hablan de las zonas de México administradas por el narco y de los políticos cómplices”, se asegura en la transcripción de la conversación del 13 de enero de 2020, es decir, en pleno gobierno de AMLO. La policía de Italia no transcribe los nombres de los políticos mencionados, pero se entiende que tiene esa información.
Más de 17 toneladas de cocaína trafica "El Flaco” en México mensualmente
"Treinta y cinco vuelos a la semana llegan a Chetumal; parten de Venezuela”, siguió hablando Villagrán López sin saber que todo estaba siendo grabado. "Están trabajando con los militares, vuelos de 500 a 800 kilos (de cocaína)”.
Si las cifras que dio Villagrán López sobre las operaciones del "Flaco” son correctas, eso significa un tráfico de entre 17.5 a 28 toneladas de cocaína al mes que entran por Quintana Roo. La imagen de todos esos aviones aterrizando impunemente recuerda a la época en que el Cartel de Sinaloa era la organización criminal protegida por el gobierno de Calderón.
El indiscreto socio del "Flaco” reveló también que este iba abrir una fábrica de jabón en Europa para usarla como empresa fachada para sus negocios criminales.
Para la operación de vender la droga al cliente final, Rivera Zazueta no viajó a Italia y envió a un representante de su confianza, llamado Salvador Ascensio Chávez, alias "Chava”. Probablemente había ya perdido la confianza en los guatemaltecos Villagrán López y Ortega Ubeda, y ellos en él. La relación se volvió conflictiva por varios retardos en la operación para transportar la droga a los compradores finales.
Los dos guatemaltecos se lamentaban mientras se cuestionaban a qué iba "Chava” a Italia. "¡Así son todos los mexicanos!”, se quejó Villagrán López. "Son güeyes (estúpidos), ¿verdad?”, respondió Ortega Ubeda. "Son todos así”.
El 23 de enero de 2020, un año después de haber recibido el primer pitazo, la policía Italiana realizó la detención de Villagrán López y Ortega Ubeda. Se les confiscaron 35 mil euros, sus teléfonos celulares, y un cargamento de 385 kilos de cocaína. En 2021 fueron condenados a 12 años de prisión.
Al "Flaco” no pudieron arrestarlo, ni a los otros involucrados. Su carrera criminal siguió creciendo hasta convertirse en uno de los principales traficantes de fentanilo a Estados Unidos, según afirmó el gobierno de ese país el 30 de enero pasado. Y de acuerdo a las grabaciones del gobierno italiano, cuenta con una red de complicidad en todos los niveles de gobierno, incluyendo a la Guardia Nacional, que ahora, gracias a la militarización de AMLO, cuenta con mayor poder.