Con una palabra define Miguel Góngora la política educativa de Alemania durante la pandemia: injusticia. El joven bogotano critica que no todos tengan las mismas oportunidades y que una vez suspendidas las clases para evitar los contagios, Alemania falló en ofrecer programas de ayuda psicológica y social a los alumnos y alumnas de familias vulnerables. Tampoco los profesores estaban preparados para impartir clases digitales. No faltó la improvisación por parte de los gobernantes para favorecer, en todo caso, a los sectores de mayor lobby. Miguel Góngora quiere ser político en Alemania. Es miembro del partido socialdemócrata SPD. Por su origen no alemán y sus convicciones políticas, defensor de una sociedad diversa y multicultural, ya ha sido objeto de persecución por parte del partido de extrema derecha alemán AfD. Pero él, fiel a sus principios de justicia social, diversidad cultural y protección medioambiental, en Alemania seguirá dando que hablar.