Marruecos sufre su primer atentado yihadista en años
21 de diciembre de 2018
Las autoridades marroquíes practicaron este viernes (21.12.2018) nueve arrestos relacionado con el brutal asesinato de dos jóvene excursionistas escandinavas por presuntos yihadistas en las montañas del Alto Atlas. El anuncio se produjo apenas unas horas después de que los cadáveres de la estudiante danesa Louisa Vesterager Jespersen, de 24 años, y la noruega Maren Ueland, de 28, fueran embarcados en un avión en Casablanca para Copenhague.
Los nuevos arrestos se produjeron por "supuestos vínculos con los autores del acto terrorista", en las ciudades de Marrakech, Essauira, Chtouka Ait Baha (todos en el sur del país), y en la norteña urbe de Tánger, según informaron las autoridades hoy en un comunicado. La policía también incautó "equipo electrónico, una escopeta, cuchillos, un uniforme militar y materiales que podrían usarse para fabricar explosivos", agregó. Las autoridades marroquíes dijeron el jueves que otros cuatro sospechosos arrestados tras el asesinato de los dos turistas habían prometido lealtad al grupo del Estado Islámico.
Un brutal asesinato grabado en directo
Los cadáveres de las dos mujeres fueron encontrados el lunes después de haber lanzado su tienda de campaña en un sitio aislado en la montaña, a dos horas de caminata desde el pueblo turístico de Imlil. Una de ellas fue brutalmente decapitada, como muestra un vídeo grabado por lo islamistas y difundido en las redes sociales. "En este momento, no hay evidencia tangible de que el video no sea auténtico", dijo el viernes la agencia de investigaciones criminales de Noruega, Kripos. En otro vídeo, los sospechosos detenidos inicialmente aparecen jurando lealtad al EI.
Los primeros cuatro sospechosos detenidos fueron arrestados en Marrakech, a una hora de la escena del crimen. Younes Ouaziad, de 27 años, vivía con sus padres en el barrio de clase trabajadora de Al-Azzouzia. Su familia y vecinos dijeron el viernes que estaban "en shock". "Era un muchacho sin antecedentes, discreto. No había nada que pudiera sugerir que fuera capaz de hacer algo así", dijo a la AFP Abdelaati, de 35 años, un vendedor de verduras del vecindario.
Consternación en Dinamarca, en Noruega y, sobre todo, en Marruecos
El primer ministro danés, Lars Lokke Rasmussen, denunció lo que él llamó un "crimen bestial". La primera ministra de Noruega, Erna Solberg, condenó lo que ella llamó un "ataque brutal y sin sentido contra inocentes".
El presidente del Gobierno marroquí, el islamista Saadedín Otmani, que encabeza una coalición de seis partidos, condenó "vigorosamente" el acto terrorista, al que calificó de "puñalada en la espalda a Marrueco y a los marroquíes" y dio el pésame a las familias de las víctima. El Parlamento marroquí reaccionó con la misma contundencia y afirmó su determinación a "reforzar los mecanismos jurídicos y legislativos para luchar contra el terrorismo en todas sus formas".
"Erradicar todo comportamiento extremista"
El ministro portavoz del Gobierno, Mustafa Jalfi, dijo ayer que se "tomarán las medidas necesarias para que este crimen no se repita otra vez", y subrayó que Marruecos dispone de una estrategia multidimensional para erradicar todo comportamiento extremista. Al mismo tiempo hizo hincapié en los esfuerzos que despliega el país en la difusión del islam moderado.
El turismo es una piedra angular de la economía de Marruecos, ya que representa el 10 por ciento del ingreso nacional. Marruecos ha evitado los ataques jihadistas desde 2011, cuando un ataque con bomba en un café en la famosa plaza Jamaa El Fna de Marrakech mató a 17 personas, la mayoría de ellas turistas europeos.
lgc (afp/efe)
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