Las dos jóvenes rusas del grupo punk Pussy Riot recién amnistiadas demostraron este viernes su férrea voluntad política. Tras casi dos años en la cárcel María Aliójina y Nadezhda Tolokónnikova han salido dispuestas a seguir batallando contra el Kremlin. En una conferencia de prensa, afirmaron que quieren luchar en el futuro por mejorar las condiciones para los presos de Rusia.