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A personas extremistas les cuesta más solucionar problemas

22 de febrero de 2021

Un grupo de investigadores británicos analizó la disposición cognitiva de más de 330 individuos y llegó a la conclusión de que quienes sostienen posturas más radicales tienden a rendir menos en tareas mentales complejas.

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El asalto de manifestantes radicales en el Capitolio de Estados Unidos.Imagen: Saul LoebAFP/Getty Images

Unos grupo de investigadores de la Universidad de Cambridge, en el Reino Unido, sugiere en un nuevo estudio que las personas que adoptan actitudes extremistas en lo social, político o religioso tienden a tener un mal desempeño para realizar tareas mentales complejas.

Más de 330 estadounidenses entre 22 y 63 años y que tenían 16 diferentes tipos de orientaciones ideológicas, fueron puestos a prueba con 37 tareas neuropsicológicas y 22 encuestas de personalidad durante dos semanas. 

Según el estudio, las tareas a solucionar fueron diseñadas de manera neutral, evitando que se apelaran a factores emocionales o políticos. Posteriormente, los expertos usaron modelos computacionales para tomar la información de los datos sobre la percepción y el aprendizaje de los participantes, además de la capacidad de realizar un ejercicio mental complejo y estratégico.

Uno de los puntos claves, según explicó la directora del estudio, la doctora Leor Zmigrod, fue que las personas con actitudes extremistas tendían a ver el mundo en blanco y negro, mientras que tenían mayores dificultades para solucionar tareas complejas que requerían pasos mentales complicados. 

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"Los individuos o los cerebros que tienen dificultades para procesar y planificar secuencias de acción complejas pueden sentirse más atraídos por las ideologías extremas, o por las ideologías autoritarias que simplifican el mundo", afirmó Zmigrod.

Además, la experta explicó que las personas con opiniones extremistas no eran muy buenas regulando sus emociones, lo que significa que reaccionaban de forma impulsiva o buscaban experiencias emocionalmente evocadoras.

"Y eso nos ayuda entender qué tipo de individuo podría estar dispuesto a ir y cometer violencia contra otros inocentes", agregó. 

En una de las tareas cognitivas, se le pidió a los participantes que respondieran con la mayor rapidez y precisión posible. Las personas que se inclinaban por la estrategia políticamente conservadora solían optar por la estrategia lenta y constante, mientras que los liberales políticos adoptaban un enfoque algo más rápido y menos preciso.

Esta llamada "firma psicológica" del extremismo fue en todos los casos una mezcla de psicologías conservadoras y dogmáticas. El estudio podría ayudar a identificar y apoyar a las personas más vulnerables a la radicalización en el espectro político y religioso.

JU (theguardian.com, eurekalert.org, cam.ac.uk, telegraph.co.uk)