En julio de 2021, el valle del Ahr, en el oeste de Alemania, se ve inundado por una crecida repentina tras fuertes lluvias torrenciales. Más de cien personas mueren y miles de casas resultan gravemente dañadas. Los expertos hablan de una "inundación del siglo”. Sin embargo, en los últimos años, los fenómenos meteorológicos, como el del valle del Ahr, son cada vez más frecuentes. No sólo en Alemania, sino en todo el mundo. Mozambique, en el sureste de África, ha sufrido por tercer año consecutivo unos ciclones devastadores. En Bangladés, debido al cambio climático, el monzón es cada vez más fuerte e imprevisible. Como resultado, la tierra inundada crece. Al mismo tiempo, las mareas de tempestad y la subida del nivel del mar amenazan al sur del país. Los expertos estiman que dentro de unos años, el 30% de Bangladés estará inundado irremediablemente. Entonces muchos millones de personas se convertirían en refugiados climáticos. Países ricos como Alemania están invirtiendo miles de millones para prepararse contra las inundaciones. Los Países Bajos han sido durante mucho tiempo pioneros en la protección contra las inundaciones, con potentes estaciones de bombeo, diques cada vez más altos y barreras contra el agua. Los países pobres no disponen de estos medios. A menudo, además de mejorar los sistemas de alerta temprana, la única opción para ellos es reasentar a las personas afectadas. El reportaje " La crísis climática mundial - ¿Cómo protegerse contra las inundaciones?" muestra la lucha desigual contra las consecuencias del cambio climático en Alemania, Holanda, Bangladés y Mozambique.