El llamado codo de tenista es una lesión que se puede producir realizando tareas cotidianas: al pintar las paredes, limpiar, cortar el cesped o podar los setos. Los movimientos repetitivos pueden sobrecargar los músculos extensores del antebrazo. Esta dolencia se manifiesta en el brazo. Tratar esta lesión a tiempo es esencial para evitar que los dolores se vuelvan crónicos.