La avenida de los Obsipos en el norte de Londres es una de las calles más caras de la ciudad. No obstante, una tercera parte de las casas permanece vacía desde hace años, el escenario perfecto para Chris Northover. Con una motocicleta de cross construida por él mismo conduce a través de una antigua embajada a toda velocidad. Todo completamente legal y con el permiso de los propietarios.