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Censo 2022 en Alemania: sin datos no hay plan para el futuro

12 de mayo de 2022

¿Cuántas personas viven en Alemania? ¿Hay suficientes viviendas, escuelas, vacantes universitarias? El censo aportará datos útiles para la política y la sociedad alemanas.

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Símbolo del Censo 2022 en Alemania.
Imagen: Sascha Steinach/IMAGO

El censo de 2022 es algo así como "el inventario de un supermercado", dice Stefan Dittrich en entrevista telefónica con DW. Dittrich es el director, en la Oficina Federal de Estadística, del proyecto sobre el censo de 2022, que comienza este 15 de mayo.

Con los datos recopilados se analizará la estructura económica, demográfica y cultural de la sociedad alemana, y luego se estudiará si es necesario que la política tome medidas, de acuerdo a la información recibida. Con el último censo, en 2011, se observó que en Alemania vivían alrededor de 1,5 millones de personas menos de lo que se creía.

Stefan Dittrich.
Stefan Dittrich es el director del proyecto sobre el censo 2022 en Alemania.Imagen: Statistisches Bundesamt

Un censo de y para la democracia

Los datos no solo son importantes para las ciudades y zonas rurales, sino también para la política, explica Dittrich: "Necesitamos el número exacto de habitantes, por ejemplo, para la circunscripción de los distritos electorales y la distribución de votos en el Bundesrat [Consejo Federal, N. de la R.]". El número de escaños que recibe un estado federal en la cámara estatal se define por el número de habitantes en dichos estados.

La base legal del censo en Alemania está estipulada por la Unión Europea: muchas preguntas las dicta dicha institución; el Bundestag (Parlamento) decide el resto. En Alemania no hay un registro administrativo a nivel nacional, por lo que los estadísticos realizan preguntas muy concretas sobre las condiciones de vida: escasez de viviendas o, por primera vez, se preguntará el gasto en alquiler sin calefacción, o el motivo por el que una vivienda está desocupada. "En verdad, todos pueden comprender que este tipo de preguntas es muy actual y ayudará a planificar mejor las cosas en el futuro”, dice Dittrich.

¿Quién participa en el censo?

No todos los 83 millones de personas, que viven en Alemania, participan en las encuestas, porque los estadísticos cuentan con información de los registros administrativos y poblacionales, donde se indican dónde y quién vive en una determinada vivienda.

Pero así y todo, no es suficiente. Aproximadamente 100.000 profesionales irán a ciertos hogares y hablarán con alrededor de 10,3 millones de personas. "Tratamos de mantener el menor contacto posible con los entrevistadores", asegura Dittrich. También se puede enviar la información más tarde por correo electrónico o correo postal. Todos los habitantes de Alemania están obligados a participar, porque tienen la obligación de aportar información al censo, si no pagarán un multa de 300 euros. Además, los aproximadamente 23 millones de propietarios de viviendas deben proporcionar información sobre sus viviendas.

Uno de los profesionales, encargados de realizar encuestas en residencias, aprendiendo en un curso de formación.
Uno de los profesionales encargados de realizar encuestas en residencias, aprendiendo en un curso de formación.Imagen: Christoph Schmidt/dpa/picture alliance

Los escandinavos, con censos totalmente digitales

En los países escandinavos el censo se realiza solo de manera digital. Todos los habitantes tienen un número de identificación personal. Es decir, que "en cualquier diligencia, donde se entre en contacto con el Estado, por una vacante universitaria, en el registro civil o para registrar un automóvil, se entrega el número de identificación personal”.

Es decir, en esos países solo tienen que sumar los datos de los diversos registros digitales a la hora de realizar el censo poblacional. En Alemania, en cambio, no se dispone de todos los datos digitalizados de la población, por lo que aún es necesario ir casa por casa para hablar con los encuestados. Es un modelo que emplea, por una parte, datos digitales y, por otra, los obtenidos de las preguntas hechas personalmente en los hogares. El modelo angloestadounidense es el más desfasado. Los datos se recaban de puerta en puerta, porque en esos países no es obligatorio registrarse en el censo.

En la actualidad, a diferencia de la década de los 80 del siglo XX en Alemania, la gente no protesta contra el la obtención de datos para el censo, porque ya está acostumbrada a aportar sus datos en Google, Amazon o Paypal. El escepticismo hacia la recopilación de datos ha descendido y, según Dittrich, "precisamente cuando se comparan todos (los datos) que se pueden revelar (comprando) online, las preguntas de un censo son discretas”.

En Alemania, el censo costará alrededor de 1.500 millones euros.

(rmr/cp)