¿Cómo es el "sistema de navegación" de las tortugas?
Las tortugas marinas regresan a sus playas originarias para desovar, y el campo magnético de la Tierra les sirve de brújula. De ese modo, se orientan instintivamente en su viaje de retorno. Aquí les explicamos cómo.
Con una brújula en la cabeza
La tortuga cabezona (o caguama) almacena el patrón de su playa de origen y utiliza el campo magnético de la Tierra como brújula, orientándose gracias a él a lo largo de su camino de regreso a través de mar abierto.
Percepción de campos magnéticos
Su orientación magnética les permite a estas tortugas volver a detectar sus playas de origen a la edad de 12 años. Aunque estén a muchos kilómetros de distancia de ellas, perciben la intensidad y el ángulo de las líneas del campo magnético. Esos factores varían según la región, ya que los distintos tramos de la costa ofrecen diversos patrones magnéticos.
No solo para tortugas
También otros animales poseen el mismo sentido magnético que la tortuga cabezona. Por ejemplo, las palomas, las aves migratorias y los cangrejos. Incluso los perros y las vacas pueden “ver” el patrón de líneas magnéticas. Las vacas pastan casi siempre en una dirección, descubrieron investigadores.
Cambios ínfimos
Pero, ¿qué hacen las tortugas cuando el campo magnético oscila, aunque solo sea mínimamente? Según estudios realizados desde 1993 hasta 2011 en la costa de Florida, EE. UU., hay una conexión entre los cambios del campo magnético y la distribución de los nidos de tortugas.
Hacia puerto seguro
El resultado del estudio, sin embargo, no significa que las tortugas pongan sus huevos como por reflejo allí donde nacieron, ya que hay otros muchos factores que tienen un papel importante en su elección. Por ejemplo, la temperatura, la calidad de la arena o la accesibilidad de las playas.
Campos invisibles para el hombre
Los seres humanos carecemos de esa percepción del campo magnético, pero necesitamos entender ese fenómeno. Por eso, la misión Swarm de la Agencia Espacial Europea (ESA) planea estudiar muy exhaustivamente el estado del campo magnético terrestre y su evolución. Los satélites con ese fin se lanzaron en 2013 al espacio.