Argentina: “Quedan miles de casos por investigar”
30 de noviembre de 2017El juicio fue calificado de histórico. Las sentencias también: 29 condenas a cadena perpetua y 19 a penas de cárcel de entre 8 y 25 años, por crímenes cometidos durante la dictadura militar argentina. Entre los condenados a reclusión de por vida se cuentan personajes como Alfredo Astiz, Ricardo Cavallo y Jorge Acosta.
Con atención siguió el proceso Esteban Cuya, investigador del Centro de Derechos Humanos de Núremberg y coordinador de la Coalición Contra la Impunidad, una red que apoya a los organismos de derechos humanos en Argentina.
La noticia:
Argentina: prisión perpetua a Acosta y Astiz por crímenes de lesa humanidad
¿Qué le parecen las condenas dictadas por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la dictadura militar argentina en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA)?
Es una decisión sumamente importante, que nos devuelve la fe en la Justicia argentina; por lo menos demuestra que hay fiscales y jueces que están dispuestos a cumplir con su obligación de aplicar la justicia según los compromisos nacionales e internacionales de derechos humanos. Aunque es una decisión algo tardía, es realmente una señal de esperanza de que se continúe con los juicios para terminar por fin con la escandalosa impunidad de tantos años, que ha estado protegiendo a militares y también sigue protegiendo a civiles que han estado involucrados en graves crímenes de derechos humanos cometidos en Argentina durante la última dictadura militar, de 1976 a 1983.
Pero en Argentina dejó de haber impunidad con la anulación de la ley de punto final y la de obediencia debida. Ha habido juicios, ha habido condenas….
Sí, pero aún hay personas que están siendo protegidas. Personal civil que también ha sido denunciado y que no está siendo citado a tribunales. Efectivamente, durante el gobierno de los Kirchner se impulsaron los juicios por los derechos humanos y se llevó a la cárcel a muchos altos oficiales, pero todavía hay una situación en que crímenes no han sido esclarecidos.
¿Qué casos quedan pendientes?
Por ejemplo, en el caso del "Tigre” Acosta, se han encontrado millones de dólares en cuentas a su nombre en Suiza. Acosta dirigió un grupo de tareas que funcionaba aquí en Europa también. Sus cómplices deben ser investigados. Lo mismo ocurre con Cavallo, que estuvo muy activo en España, hasta que fue identificado y extraditado. Mi esperanza es que se profundice la investigación de todo el equipo que les acompañaba y les protegía.
Vale decir que con este juicio no se cierra el capítulo del procesamiento judicial de la dictadura argentina…
Este juicio fue sumamente importante, es un juicio con una decisión histórica, pero no debemos olvidar que la dictadura militar argentina dejó por lo menos 30.000 víctimas. Se han investigado casos paradigmáticos, casos muy simbólicos, pero hay otros miles de casos en todo el país que no han sido investigados. Yo no le quito el mérito a esta decisión histórica, pero hay que continuar con los esfuerzos por hacer justicia.
Durante este juicio, Astiz volvió a justificar el "combate contra la subversión”. El fallo del tribunal representa también una condena de esos argumentos…
Exactamente. Esa teoría de los "dos demonios” que se argumentó en su época justamente para justificar las leyes de obediencia debida y de punto final, que eximían de los juicios a los responsables de abusos de los derechos humanos, queda descartada. Con esta condena a tantos militares, queda en evidencia que no se puede aceptar esa teoría de que era necesario enfrentar la violencia con terrorismo de Estado.
¿Está dando Argentina en esto un ejemplo a otros países de América Latina, que distan de haber realizado juicios de estas dimensiones contra los crímenes de las dictaduras?
Es un ejemplo muy importante que hay que destacar y que esperamos que se extienda también a otros países de América Latina. En Brasil, por ejemplo, el Partido de los Trabajadores fue el único grupo político que intentó ajustar cuentas con el pasado y ponerle fin a la impunidad, pero no lo logró. Es decir, los represores de la época de la dictadura siguen protegidos por una ley de amnistía.
Pero también aquí en Europa tenemos países donde está pendiente el tema, como es el caso de España, donde hay cerca de 130.000 desaparecidos. Es uno de los países con más desaparecidos en todo el mundo. Pero estos casos no han sido investigados. España también debe verse en el ejemplo argentino y debe enfrentar críticamente esas deudas con su pasado de crímenes de derechos humanos.