"Bienvenida al paraíso”, es como reciben Lucía y Gonza a Pía Castro en su centro de skate al norte de Berlín. El lugar se llama Greifswalder DIY, y pertenece a la red de "DIYs”, del inglés do it yourself, hágalo usted mismo, que hay por todo el mundo. Los patinetos o, más cool, skaters, encuentran un lugar abandonado, lo diseñan, constriyen y patinan. Esto fue lo que pasó con Greifswalder DIY, donde los mismos chilenos Lucía y Gonza fueron parte del proyecto. Ahí es donde van a hacer skate y donde enseñan a otros jóvenes a subirse al skate. "Construir una ciudad por todos lados no es un futuro que nadie quiera”, dicen, y con eso justifican haber tomado un lugar en Berlín que estuvo a punto de ser vendido como un lote para construir otros edificios. Ahí llegaron Lucía y Gonza a fundar la filial de la academia "Skatesencia”, cuya central está en Chile: "queremos transmitir que a nadie le importe cómo estás vestido o vestida, cómo traes el pelo”, dicen Lucía y Gonza. Básicamente se salen de las normas que dicta la sociedad. El skate o la patineta es una herramienta que les permite ser ellos mismos, aunque esto se mezcla con Berlín, una ciudad que te permite hacer lo que quieras en donde quieras.