A 25 asciende cifra de muertos en accidente ferroviario en Bélgica
15 de febrero de 2010
En el primer tren siniestrado había diez fallecidos y en el otro 15 víctimas mortales, afirmó igualmente la cadena de televisión VRT,
El accidente, que se produjo a las 08:30 de la mañana, en plena hora punta de tráfico de cercanías y en territorio de la comunidad de Flandes, causó también un número aún no determinado de heridos, también informaron la radiotelevisión belga-flamenca VRT y el periódico flamenco "De Standaard" en su versión digital.
"Fue horrible. De repente oímos una fuerte explosión y todo quedó parado. Salimos corriendo como pudimos de allí", aseguró un pasajero. "Todos los servicios de urgencias están ya trabajando in situ. Los heridos más graves recibieron los primeros auxilios en el lugar de los hechos y posteriormente fueron trasladados a los centros sanitarios más próximos", aseguró Dirk Pieters, alcalde de Halle.
"Creemos que el menos 20 personas han perdido la vida en este accidente", declaró el alcalde. Podría haber "decenas" de heridos, agregó.
Atrapados entre los escombros
Varios pasajeros quedaron atrapados dentro de los vagones a causa de la colisión y tuvieron que ser rescatados por los bomberos, informó la policía local.
El choque frontal entre los dos trenes, cuya causa aún se desconoce, se produjo a una distancia de un kilómetro de la estación de Halle. El siniestro ocurrió en medio de una fuerte nevada sobre vías congeladas.
Uno de los trenes cubría el trayecto entre Lovaina y Gravenbrakel y el otro hacía la ruta entre Quievrain y Lovaina, según Kristien Berckmans, portavoz de Ferrocarriles Belgas.
Trayecto muy frecuentado
El tráfico ferroviario entre Francia y Bélgica quedó suspendido hasta que se despejen las vías, según la radio flamenca. Se trata de un trayecto utilizado con mucha frecuencia por viajeros que residen fuera de Bruselas y que se desplazan cada día a sus puestos de trabajo en la capital belga.
Las imágenes del siniestro muestran las dos locomotoras empotradas una en la otra, como si se tratara de los fuelles de dos acordeones. La empresa federal de Ferrocarriles Belgas (SNCB) suele utilizar trenes muy modernos, normalmente de fabricación francesa, para cubrir sus rutas nacionales más importantes pero -con frecuencia- descuida el material para cercanías.
En concreto, los dos trenes siniestrados fueron fabricados en los años 70. A modo de ejemplo, el 80 por ciento de los vagones del metro de Bruselas data de esa época. Igualmente, el 90 por ciento de los tranvías que circula en la capital belga data de finales de los años 60. dpa
Editor: José Ospina-Valencia