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Kosovo celebra su plena independencia

10 de septiembre de 2012

Este 10 de septiembre marcó el término de la misión de la autoridad internacional encargada de supervisar la situación de Kosovo desde que declaró su independencia en 2008, un paso más hacia la plena soberanía.

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Kosovo celebra si independenciaImagen: picture-alliance/dpa

Estados Unidos y Alemania saludaron el fin de la independencia supervisada. El vicesecretario estadounidense para asuntos de Europa y Eurasia, Philip Reeker, señaló en Pristina que Kosovo ha logrado lo necesario para dar ese paso y dijo que Estados Unidos seguirá asistiendo a Kosovo.

Alemania saludó también la medida y dijo que las reformas implementadas conducirán a la soberanía de Kosovo, que ahora es capaz de actuar en solitario y no sólo en campos como en la lucha contra la inseguridad o la corrupción, sino también en la normalización de sus relaciones con Serbia.

Rechazo de Belgrado

Sin embargo, antes de la celebración en Pristina, Belgrado reiteró una vez más el rechazo a la soberanía de su antigua provincia. "Para nosotros la cuestión kosovar no está resulta", dijo el jefe de gobierno serbio, Ivica Dadic, negando que la Unión Europea (UE) haya establecido el reconocimiento de la independencia kosovar como precondición para entrar en el bloque. Bruselas pidió sólo "una relajación de las relaciones entre Belgrado y Pristina", señaló Dadic.

Pese al fin del mandato de la Oficina Civil Internacional (ICO) - que fue establecida por las potencias occidentales que reconocían la independencia de Kosovo- se prevé que continúe una fuerte presencia internacional sobre el terreno, con la misión KFOR liderada por la OTAN y la misión de la UE EULEX.

Labores internacionales

La KFOR bloquea en el norte de Kosovo todos los caminos ilegales que pasan por la frontera verde por la que desde hace un año los serbios trafican con mercancías. Ahora, los serbios sólo podrán utilizar los pasos oficiales de Brnjak y Jarinje, que boicotean desde hace más de un año, porque no aceptan las aduanas y policía fronteriza del gobierno kosovar. Los 35.000 serbios que viven en el norte de Kosovo tampoco se someten a Pristina y quieren seguir perteneciendo a Serbia.

Aunque impopular entre la mayoría albanesa, la misión de la ONU UNMIK, que gobernó Kosovo después de 1999 también permanecerá, después de que Rusia vetara una moción para poner fin a su mandato. Moscú apoya a Belgrado en su intento de bloquear la entrada de Kosovo en la ONU.

El analista Illir Deda dijo a la televisión serbia TB B92 que, en la práctica, la misión cambia de forma, pero la esencia de la supervisión continúa, con la EULEX, la KFOR y la UNMIK sobre el terreno.

Fuente: dpa

Editora: Emilia Rojas