Aumenta un grado la escalada de tensión en la península de Corea: el estado mayor de las fuerzas armadas norcoreanas autorizó un eventual ataque nuclear a los Estados Unidos. La tensión se traslada también el plano económico: Corea del Norte clausuró por segundo día consecutivo el complejo industrial de Kaesong, en el que participan empresas y trabajadores surcoreanos.