Schaaf rejuveneció al Bremen
8 de septiembre de 2011
Thomas Schaaf nunca ha estado en otro lugar que no sea el Werder Bremen. De hecho, las únicas veces que ha jugado con otra camiseta fueron sus dos participaciones por la selección de Alemania sub 21 en los ochenta. Como entrenador, primero lideró al equipo juvenil del Werder Bremen, luego a su equipo amateur y finalmente al equipo mayor desde 1999. Este tipo de identificación total con un equipo es realmente extraño en la primera división del fútbol europeo.
Después de estos doce años, existe la sensación de que Schaaf ha cerrado el círculo de la fortuna futbolística. En la temporada en que se hizo cargo del equipo, el Werder terminó 13 en la Bundesliga. El mejor momento fue, claro, cuando el año 2004 ganó la liga y la Copa Alemana, época en que el Bremen era un equipo mayor. El camino siguió por algún tiempo, con la escuadra terminando segunda o tercera en las próximas cuatro temporadas.
Se puede decir que el vuelo del Bremen, ese estilo tan particular de contraatacar, fue el modelo a seguir por la exitosa selección nacional bajo el mando de Jürgen Klinsmann y posteriormente Jogi Löw. Por cierto, el Bremen ha nutrido al 11 alemán con algunos jugadores esenciales, como Torsten Frings, Per Mertesacker y Mesut Özil, que alcanzó las 71 apariciones por el Bremen antes de irse al Real Madrid.
¿Fin de una era? ¡De ningún modo!
Cuando el Bremen terminó a duras penas la última temporada, muchos pensaron que Schaaf había llegado al fin de su ciclo natural. La tristeza embargaba al equipo: la renuencia del planteamiento táctico a dar importancia a la defensa se volvió un problema grave, mientras que la partida de Diego en 2009 y de Özil en 2010 parecen haber dejado un hueco muy difícil de llenar en el mediocampo, donde el Bremen siempre había sobresalido. Y desde la semana pasada Bremen tendrá que arreglárselas sin el defensa central Mertesacker, quien fue vendido al club inglés Arsenal.
Los hinchas, como suele suceder con el fútbol exitoso, de ataque, abuchearon a su descorazonado plantel tras la derrota de 4-0 contra el Schalke, en noviembre pasado. Ese fue un punto bajo del equipo. Pero contra todos esos designios deprimentes, Bremen ha vuelto a alzar el vuelo. Con tres triunfos esta temporada (de cuatro posibles), ahora tienen los mismos nueve puntos que el líder de la liga, el poderoso Bayern Múnich.
¿Cómo se explica este retorno de la fortuna al camarín del Bremen? El mismo Schaaf dice no estar en conocimiento de una fórmula mágica. "Es simplemente tener la imaginación para creer que puedes mejorar las cosas con el equipo que tienes", dijo a Deutsche Welle. "Y nosotros definitivamente tenemos la imaginación suficiente para creer que podemos mejorar mucho con este equipo".
El equipo de Schaaf-Allofs, cuestionado
La miseria de la última temporada llegó al punto de que los hinchas empezaron a atacar la exitosa dupla que Schaaf había creado con el director del club, Klaus Allofs. Sin embargo, Schaaf perdona y entiende ese descontento.
"El fútbol no sólo es más rápido en la cancha. Todo lo que rodea al juego va mucho más veloz: el éxito, los resultados", dice. "Yo creo que nuestra suma de éxitos logró demorar un poco las críticas", complementa.
Schaaf también cree que la estabilidad que la dupla Schaaf-Allofs ha conseguido tiene mucho que ver con lo que es el Bremen actualmente. "La gente con la que trabajamos saben lo que significa ese trabajo", dijo. "Ellos sabían lo que Klaus Allofs buscaba y lo que Thomas Schaaf buscaba, y eso ha ayudado".
La estabilidad claramente ayudó al Bremen a superar su última difícil temporada, pero Schaaf piensa que esa fortaleza puede engrandecer al equipo dentro del cambiante mundo del fútbol.
"Suele suceder que cuando firmas con un jugador, tú dices ΄está bien, si tomamos a uno, se irá rápido. Otro más nos vendría bien. Pero si añades un tercero, empezaba a ser raro y un cuarto habría sido impensado΄", explica. "Hoy en día puedes cambiar al equipo completo. Seis, siete, ocho, 12 jugadores, y retomar un equipo en esas condiciones toma mucho tiempo. Pero nadie tiene tiempo y nadie te da tiempo para hacer ese trabajo".
¿Significa este mundo de cambio constante que Schaaf jamás trabajará en otro club? Él, tranquilo, simplemente responde "no lo descartaría".
Autor: Ben Knight / Diego Zúñiga
Editor: Enrique López