Los 13 parajes más bellos de Alemania
Cada verano queda demostrado: a los alemanes les gusta vacacionar en su propio país. Y para ello tienen de donde escoger: Alemania ofrece playas y montañas, castillos y ciudades históricas, bosques y lagos.
Borkum
Con cerca de 2.000 horas de sol al año, la más occidental de las islas del Mar del Norte es uno de los lugares más soleados del país. En medio del Parque Nacional del Mar de Frisia (o Wattenmeer), se la llama también la “Perla del Mar del Norte”, con casi 31 kilómetros cuadrados, largas playas de arena, atractivos paisajes marinos y pequeñas ciudades llenas de cultura.
Mar de Frisia
Las aguas del Mar del Norte se retiran dos veces al día, dejando al descubierto el fondo marino con innumerables caracoles y conchas. El paisaje ha sido incluso declarado Patrimonio Natural de la UNESCO. La ciudad-estado de Hamburgo y los Estados de Schleswig-Holstein y Baja Sajonia han reconocido como Parque Nacional las partes de esta maravilla ubicadas en sus terrirorios.
Isla de Rügen
Sol, playa y mar: la mayor isla alemana, llamada también “Perla del Báltico”, es parte del Estado de Mecklenburgo-Pomerania Occidental. Las bahías dividen a la isla en varias penínsulas, por las que la costa se extiende a lo largo de unos 570 kilómetros. También esta es una de las regiones más soleadas del país.
Monte Watzmann
Ubicado en los alpes bávaros, es un idilio para quienes disfrutan de escalar o hacer senderismo. Con 2713 metros de altura, el Monte Watzmann es el símbolo de la región en torno a la ciudad de Berchtesgaden. Es la segunda altura en importancia del país. Con sus montañas, caminos, lagos y bosques, en la frontera con Austria, esta es una de las zonas montañosas preferidas de los alemanes.
Berlín
Cada año, a orillas del río Spree, la capital alemana bate sus propios récords de visitantes. Aquí se ha escrito gran parte de la historia alemana y mundial. Muchos quieren sentir su espíritu. Una foto en la Puerta de Brandenburgo, que una vez fue el símbolo de la división del país y hoy se levanta en medio de una ciudad pujante, es un recuerdo obligado.
Rothenburg ob der Tauber
Esta es una de las más hermosas ciudades pequeñas de Alemania. A unos 100 km de Núremberg, invita a viajar al pasado. En ningún otro lugar se ha conservado tanto del Medioevo como aquí. Con dos millones de visitantes al año, Rothenburg ob der Tauber es uno de los sitios más visitados de Baviera.
Loreley
Es el símbolo del romanticismo del río Rin: Sentada sobre la roca de la Loreley, cuenta la leyenda, una hermosa mujer peina su cabello rubio. La sirena hace perder el rumbo y estrellarse contra la roca a los navegantes.Curiosamente, según las estadísticas, esta es realmente una zona del Rin donde con frecuencia encallan embarcaciones.
Heidelberg
El castillo romántico sobre la ciudad de Heidelberg es una ruina y, sin embargo, se trata de una de las atracciones turísticas más visitadas en Alemania desde el siglo XIX. Una vez fue la residencia del príncipe elector de Palatinado pero, en la guerra por su sucesión, en 1693, el edificio quedó destruido. Con una lluvia de fuegos artificiales, la historia se recuerda varias veces al año.
Suiza Sajona
Al este de Alemania, cerca de Dresden, se puede disfrutar de esta maravilla. Con sus rocas, valles y desfiladeros, el Parque Nacional Suiza Sajona (Sächsische Schweiz) se extiende por más de 36.000 hectáreas.
Lago Chiem
El mayor lago bávaro, también llamado “mar bávaro”, abarca unos 80 kilómetros cuadrados. Surgió hace más de 10.000 años y cuenta con varias islas. En la mayor, se halla el Nuevo Castillo. El rey Luis II de Baviera materializó en él su sueño de un " Versalles bávaro", que actualmente es visitando por miles de turistas al año.
Lago Constanza
El lago más grande de Alemania mide unos 70 km de largo, en algunos puntos llega a tener 14 km de ancho y alcanza hasta 254 metros profundidad. Al borde de los Alpes, en la triple frontera entre Alemania, Austria y Suiza, cautiva especialmente con Mainau, su isla de las flores. Más de un millón de personas lo visitan cada año.
Castillo de Neuschwanstein
Es el castillo más popular del rey Luis II de Baviera, quien lo construyó como retiro. Sin embargo, ya desde su muerte en 1886, este refugio romántico del sur bávaro fue abierto al público. Unos 1,4 millones de turistas, sobre todo extranjeros, lo visitan anualmente.
Lago del Rey
El agua cristalina del lago con su conocida capilla de San Bartolomé está rodeada de un grandioso panorama alpino. Es el corazón del Parque Nacional de Berchtesgaden. Destino ideal para los amantes del agua y las montañas, pero también para románticos y soñadores.