Los efectos del alcohol
18 de junio de 2006
Dormían como angelitos, sedados por litros de alcohol, en el interior de un Ford Transit. Seguramente fue la borrachera la causa de que olvidaran poner el freno de mano, o dejaran puesta la marcha del coche. Fuera el freno o la marcha el culpable, lo cierto es que el vehículo comenzó a circular y chocó con otro coche que estaba aparcado, bloqueando la calle.
Mientras tenían el accidente, los hinchas ingleses seguían sumergidos en los más profundos sueños. Ni siquiera la llegada de la policía les despertó. Los agentes tuvieron que emplearse a fondo: primero golpeando con los nudillos la ventanilla del coche, luego directamente a gritos y zarandeando el coche.
Con faldas y a lo loco
Mientras que en Maguncia, en el oeste de Alemania, los dos ingleses dormían, en el sur, en Múnich, un escocés disfrutaba de su pasión futbolística mostrándole el trasero a los transeúntes, entre ellos a una policía fuera de servicio. Ataviado con la falda tradicional de su país, el joven aireaba sus vergüenzas hasta quedar sentado con los genitales a la vista del público pasante.
Cuando la policía alemana quiso detener al escocés, éste intentó morder a un agente en un brazo. Finalmente fue enviado a comisaría, donde pasó la noche.