Sociedad
Cibersexo 3.0
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Mientras políticos y científicos continúan hablando sobre la forma de abordar el cibersexo, la industria experimenta ya con nuevas posibilidades. Una empresa de Ámsterdam, dedicada al campo de la "teledildónica", desarrolla consoladores y vaginas artificiales que pueden interactuar a través de Internet. Sin embargo, esta liberación digital también conlleva peligros. Los psicólogos afirman que existe un alto potencial de adicción, especialmente en prácticas que no implican interacción con un ser "real”.