Atuendos olímpicos: de pálidos a estridentes
A partir de esta semana los atletas alemanes obtienen su vestimenta para los Juegos Olímpicos. Desde la reunificación alemana el estilo y diseño de los conjuntos variaron más que el balance deportivo del equipo nacional.
Pyeongchang 2018: discreción
Más bien clásico, por no decir inadvertido, se presenta el atuendo de los deportistas alemanes para los Juegos Olímpicos de Invierno en Pyeongchang 2018. El beige y el verde son los colores predominantes. Es la primera vez, luego de 17 olimpíadas de invierno, que el equipo nacional no luce una colección diseñada por el muniqués Willy Bogner.
Albertville 1992: cuellos de piel
Las damas: de blanco y entalladas. Los caballeros: de castaño y holgado. Pero todos luciendo cuellos de piel en las chaquetas. Así fue el atuendo del primer equipo olímpico alemán, luego de la caída del Muro de Berlín, que triunfó en Francia y encabezó el medallero (10 veces oro, 10 veces plata y 6 veces bronce).
Lillehammer 1994: sol nórdico
Blanco como la nieve, combinado con un naranja "puesta de sol" - así se presenta la patinadora artística y dos veces campeona olímpica, Katharina Witt, en Noruega. El diseñador Willy Bogner hizo bordar en cada prenda un sol – para que el sol brille para el equipo alemán, también en el alto norte. El equipo resultó tercero en la evaluación global (9/7/8), detrás de Rusia y Noruega.
Nagano 1998: negriblanco
El atuendo de los Juegos Olímpicos en Japón pasó casi inadvertido. Los atletas lucían sacos discretos, en blanco o negro. Pero Katja Seizinger (arriba a la derecha) no pasó inadvertida: la esquiadora ganó dos medallas de oro y una de bronce. El equipo alemán fue el más exitoso de todos los participantes (12/9/8).
Salt Lake City 2002: tostadas invernales
En los Juegos Olímpicos en EE.UU. los deportistas alemanes, como el as del trineo Georg Hackl (der.), combinaron los colores tostado, blanco y naranja. En estos Juegos, que quedaron en la memoria sobre todo por el escándalo de soborno dentro del Comité Olímpico Internacional, los atletas alemanes ocuparon el segundo lugar en el ranking de naciones (12/16/8), detrás de Noruega.
Turín 2006: caramelos ganadores
Las estrellas alemanas de los deportes de invierno Georg Hackl, Sylke Otto, Evi Sachenbacher, Tobias Angerer y Maria Riesch (de izq. a der.) viajaron a Italia en tonos verde menta y naranja bombón. Según Claudia Pechstein, ganadora olímpica en patinaje de velocidad, el atuendo era "fresco y alegre". Un diseño que trajo suerte al equipo alemán: encabezó el medallero (11/12/6).
Vancouver 2010: hojas de arce
En Canadá los atletas olímpicos alemanes combinaron pantalones blancos con chaquetas amarillas. Hombres y mujeres se distinguían por sus chalecos azul claro y rosa, respectivamente. En cada uno de los cuales lucían una hoja de arce detrás del águila federal alemán. La esquiadora Victoria Regensburg (abanderada) triunfa en estos Juegos Olímpicos.
Sochi 2014: explosión de color
El atuendo en Rusia debía ser un homenaje a "Waldi", la mascota de los Juegos Olímpicos de 1972 en Múnich. Pero una crítica dijo que el equipo alemán parecía una "escolta de muñequitos de plastilina, amasados por un grupo de preescolares". A nivel deportivo tampoco fue la olimpíada más exitosa para Alemania, que terminó en sexto lugar (8/6/5) respecto a las demás naciones.