Pía Castro visitó a los hermanos Mejía en la calle 33 de Bogotá, lugar que daría origen a la banda La-33 y que hoy recibe a diversos profesionales del mundo de las artes. A principios del 2000 este matrimonio de 12 músicos, como lo definirían ellos mismos, iniciaría un proyecto musical sin pretensiones y con el objetivo de devolverles la salsa perdida de los setenta a los colombianos. La-33 se reuniría por esas fechas en esta misma casa de la calle 33 para bailar, componer, ensayar y delinear futuras rutas de producción. Bastó poco tiempo para que la banda hiciera bailar a todo un país, llegando incluso a alcanzar la posición número 1 durante semanas en la estación radial Tropicana Estéreo. Pía Castro conversó con Sergio y Santiago sobre la evolución de la banda, la cultura salsera en Colombia, de cómo es posible vivir de la música sin tener que estar contractualmente ligados a sellos discográficos y de sus hits que han sido reproducidos tanto en Europa como en Asia.