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Alemania, un campeón pragmático

Daniel Martínez (EL)13 de julio de 2015

Las estadísticas muestran un pobre balance de la selección alemana en su primer año como campeona del mundo, pero la culpa es del orden de prioridades: para el equipo de Joachim Löw lo importante aún está por venir.

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Imagen: Laurence Griffiths/Getty Images

El azar quiso que Alemania estrenara su corona como campeón del mundo precisamente frente a la selección a la que derrotó para obtenerla: Argentina. En Düsseldorf, ante su afición, la seleccion alemana caía contundentemente por 0-4 en el minuto 50 del partido amistoso que revivía la final del Mundial de Brasil en de Rio de Janeiro. Pese a ello nadie estaba triste o preocupado.

Por el contrario, la derrota hasta se celebró. Al fin y al cabo los goles del descuento para el resultado final de 2-4 los anotaron André Schürrle y Mario Götze, los dos héroes del Estadio Maracaná, donde el primero sirvió el pase y el segundo consiguió la anotación que le dio a Alemania su cuarta estrella mundial.

En este debut como campeón del mundo salió ya a relucir la característica principal de Alemania en la primera temporada ostentando el título: el pragmatismo. El balance estadístico con el que los alemanes llegan a su primer aniversario no es para nada brillante. En 10 partidos hay tres derrotas y dos empates; 22 goles a favor y 12 en contra, es decir, por cada dos goles conseguidos, más de uno encajado.

Sin embargo en los juegos oficiales, en aquellos que cuentan y suman para la clasificación a la Eurocopa 2016, Alemania obtuvo el botín que buscó. De 18 puntos posibles obtuvo 13, y su participación en el torneo de Francia no peligra. Por ello la selección -tan pragmática en sus planes- ya tiene sede de trabajo, el hotel Eremitage en Evian Les Bains.

El cuerpo técnico al mando de Joachim Löw está acostumbrando a la afición a aceptar una visión a largo plazo. Alemania tiene una forma muy particular de entender su papel como campeona del mundo. El partido de hoy solo cuenta como una piedra que sirva de fundamento para el éxito de mañana. Los resultados positivos son aquellos que llevan a la competición donde se disputan los títulos (Eurocopa y Mundial), y aportan a acercarse a la meta de poder ganarlos.

España, el antecesor de Alemania, se paseó por el mundo durante seis años (desde la obtención de la Eurocopa 2008 hasta el Mundial 2014) haciéndole sentir a sus rivales el rigor del campeón, ratificando juego tras juego que era el mejor. Su récord de 29 partidos invicto, de ellos 24 con victoria, da fe de ello.

Los alemanes actúan distinto, en parte porque no pueden darse el lujo de doblegar al contrario a su antojo. España logró algo así gracias a que contó durante todo ese tiempo con un equipo casi intacto, compuesto por una generación excepcional. Para Joachim Löw el triunfo en el Mundial de Brasil 2014 llegó con el ocaso de jugadores fundamentales, y el proceso de madurez de otros importantes.

El reto de los alemanes es ser campeón al mismo tiempo que va sumando nuevos jugadores a los que les debe trasferir la responsabilidad de conseguir nuevos títulos (Eurocopa 2016) y defender el que ya se posee (Mundial Rusia 2018).

Super Victor, la mascota de la Eurocopa Francia 2016, presenta el próximo trofeo que Alemania quiere ganar.
Super Victor, la mascota de la Eurocopa Francia 2016, presenta el próximo trofeo que Alemania quiere ganar.Imagen: picture-alliance/dpa/G. Roth

Además, Joachim Löw también está dedicado a ajustar su esquema táctico. El entrenador alemán no se ha dado por satisfecho con la idea de apegarse a la idea que tuvo éxito en Brasil y ha venido paso a paso, centímetro a centímetro, cambiando la estructura futbolística del equipo.

Resultados como la derrota frente a Estados Unidos, o el empate ante Australia, parecen no compaginar con el papel de campeón del mundo, pero en esos partidos Alemania aprendió mucho de los experimentos que realizó. ¿Es posible defender con tres centrales y atacar con dos delanteros? ¿Es mejor formar sin delanteros y tener atrás a cuatro defensas de los cuales dos son en realidad mediocampistas?

Alemania ha sido muy pragmática en su primer año como campeona del mundo. La búsqueda de respuestas a las dudas que tienen ha sido lo más importante. La prioridad no es ganar hoy sino aprender lo necesario para obtener los verdaderos triunfos mañana: en la Eurocopa 2016 y el Mundial 2018.