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Proliferación de santos preocupa también al Vaticano

DW-WORLD / jov18 de febrero de 2008

Un documento presentado por la Santa Sede plantea nuevas normas para examinar supuestos milagros, uno de los requisitos imprescindibles para la beatificación, que supone el primer paso para declarar santo a una persona.

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La beata Madre Teresa de Calcuta. (q.e.p.d).Imagen: AP

El Vaticano instó en dicho documento a los obispos, responsables de iniciar los procesos de beatificación y canonización, a ser más rigurosos, precavidos y objetivos en sus análisis de los candidatos.

El documento no tiene carácter legislativo, su objetivo es contribuir a que en procesos futuros se apliquen mejor las normas existentes. Según se explica en el propio texto, de 86 páginas, era necesario un documento así puesto que en los últimos 20 años los procedimientos para recabar y analizar pruebas estaban siendo "problemáticos".

Entre estas normas está, por ejemplo, la de respetar el plazo de cinco años tras la muerte de una persona antes de empezar un proceso de beatificación. El anterior Papa, Juan Pablo II, se saltó este precepto en el caso de la madre Teresa de Calcuta e inició el proceso tan sólo dos años después de su muerte, en 1997.

¿Santo en 30 días?

Pero también el actual pontífice, Benedicto XVI, dio permiso para iniciar un proceso de beatificación de su predecesor cuando apenas había transcurrido un mes desde el fallecimiento del Papa polaco.

Bajo el pontificado del Papa Juan Pablo II, el Vaticano fue criticado por algunos por haberse convertido en una "fábrica de santos". Juan Pablo II, que reinó por cerca de 27 años, beatificó a cerca de 1.340 personas y canonizó a unas 500, más que todos sus predecesores juntos, desde que el actual procedimiento se instauró en 1588.

¿Qué tan “santa” fue la Madre Teresa?

Las críticas contra la proliferación de beatos y santos se empezaron a hacer manifiestas con el caso de la Madre Teresa. Las dudas de fe de la Madre Teresa de Calcuta documentadas en cartas hicieron tambalear más de una vez a la comisión de estudio de la beatificación de la fundadora de la orden de las Misioneras de la Caridad y premio Nobel de la paz que tuvo lugar en el año 2003.

En las cartas, que salieron a la luz pública, la monja católica fallecida en 1997 hablaba de "oscuridad", "soledad" y "tormento" y aseguraba que albergaba dudas sobre la existencia de Dios y Jesucristo. Su sonrisa, escribía, era "una máscara" o "un manto que todo lo cubre".

La fundadora de la orden siempre había pedido que su correspondencia fuera destruida, pero la Iglesia no permitió que se cumpliera este deseo. La Madre Teresa de Calcuta, nacida en Albania, se hizo famosa en todo el mundo por su trabajo en barrios pobres de La India. Aún no se sabe cuánto durará su proceso de canonización. La Madre Teresa, como todos los beatos, puede ser venerada en su iglesia local. Sólo los santos pueden ser admirados en las iglesias católicas de todo el mundo.

Beatificación como acto político: “Y como 10.000 extras…”

Pero el caso de la beatificación masiva de 498 "mártires de las persecuciones religiosas" de la Guerra Civil española, en octubre de 2007, batió todos los récords de la inflacionaria lista de almas santas. Aunque la beatificación ya había sido decidida bajo el pontificado del papa polaco, el alemán Benedicto XVI asumió el proceso y aprovechó para exhortar a los españoles a trabajar por la "reconciliación" y la "convivencia pacífica". El llamado del Papa buscaba aplacar las polémicas generadas en algunos sectores de la izquierda europea por la masiva beatificación de víctimas de un sólo bando del conflicto que duró desde 1936 a 1939 y empañó la historia de Europa en el siglo XX.

Las críticas de la mayor beatificación de la historia de la Iglesia se generaron por el carácter “político” del acto producido pocos días antes de la aprobación de la Ley de Memoria Histórica que rehabilita a todas las víctimas de la Guerra Civil española y de la posterior represión de la dictadura de Francisco Franco.

También América Latina produce beatos y santos

Pero Benedicto XVI parece ahora querer corregir algunos errores, delegando las ceremonias de beatificación y presidiendo sólo las de canonización, la última etapa del proceso. Por lo pronto, este 27 de abril de 2008 se beatificará a una latinoamericana: la madre superiora venezolana Candelaria de San José Paz Castillo Ramírez que “como buena y excelente bordadora con la aguja y el hilo llevó sus quehaceres de forma extraordinaria para dar gloria a Dios en la ayuda desinteresada a los más pobres y presos”.