Angela Merkel ha advertido del peligro para la salud pública que conllevan las teorías de la conspiración y el negacionismo del virus. ¿Por qué no se prohíben las manifestaciones contra las restricciones, que suponen un peligro para la salud pública? ¿Cómo puede protegerse la democracia alemana de ataques antidemocráticos? Hablamos con el consultor en comunicación política Franco Delle Donne.