1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW
CriminalidadGlobal

Médicos sin Fronteras cierra hospital en Haití tras ataque

28 de junio de 2021

La ONG anunció que el centro asistencial, ubicado en la entrada sur de Puerto Príncipe, no atenderá público de manera temporal, tras haber recibido disparos en medio de un choque entre pandillas.

https://p.dw.com/p/3vhr4
La policía haitiana se ha visto superada por la violencia en distintos barrios de Puerto Príncipe.
La policía haitiana se ha visto superada por la violencia en distintos barrios de Puerto Príncipe.Imagen: Reginald Loussaint/AFP/Getty Images

La ONG Médicos sin Fronteras (MSF) anunció este lunes (28.06.2021) el cierre por al menos una semana de su hospital en Puerto Príncipe, dos días después de ser blanco de un ataque armado, en medio de una creciente violencia en Haití. El atentado no dejó heridos, pero MSF de todos modos evacuó a su personal y pacientes del sanatorio, ubicado en una zona donde se produce una guerra entre pandillas rivales.

"Mientras los equipos de MSF atendían a los pacientes, unos individuos armados dispararon varias veces en dirección al centro de urgencias", dice un comunicado de prensa. "La seguridad del personal es nuestra prioridad porque no podremos tratar a la población si nuestro staff está en peligro", dijo Alessandra Giudiceandrea, jefa de misión de MSF en Haití, quien cree que la organización no fue blanco directo de las bandas armadas. El hospital está ubicado en Martissant, en la entrada sur de la capital haitiana.

"En momentos en que deberíamos poder ampliar nuestras actividades debido al covid-19 y otras necesidades, estamos luchando para mantener nuestras estructuras abiertas a pesar de las deplorables condiciones de seguridad", lamentó Giudiceandrea. Desde comienzos de junio, el conflicto entre las pandillas ha dejado decenas de muertos y heridos, además de miles de desplazados.

Creciente inseguridad

Aunque tolerado por las pandillas en Martissant, MSF sigue expuesta a los riesgos de una creciente inseguridad. A principios de junio, uno de sus empleados fue asesinado a tiros de camino a casa. Asimismo, personas armadas robaron a dos conductores de ambulancias de una ONG y se produjeron enfrentamientos cerca del centro de emergencias de Martissant.

"El atentado del sábado 26 de junio es un acontecimiento sin precedentes", afirma la ONG, que explica que la seguridad de sus equipos ha sido puesta a prueba durante semanas. Martissant se encuentra en la zona de guerra entre los grupos armados de Grand Ravine y Ti Boi, que se disputan el control del territorio. La ONU estima que unas 17.000 personas han debido abandonar sus hogares debido a los conflictos armados en el país.

DZC (EFE, AFP)