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Los sindicatos

Aitziber Romero Bengoetxea4 de diciembre de 2006

Bismarck instauró en Alemania las primeras medidas de seguridad social con el fin de apaciguar las presiones que ejercían en ese momento los sindicatos, que luchaban por los intereses de los trabajadores insatisfechos.

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Conductores de autobús parados en StuttgartImagen: AP

Con el inicio de la clase obrera se desarrolló al mismo tiempo un movimiento obrero. Así es como surgieron los primeros sindicatos, cuya función era luchar por condiciones laborales más humanas y un mayor salario.

Otto von Bismarck
Otto von Bismarck instauró las primeras medidas de seguridad social

Durante el siglo XIX en Alemania, el Káiser Bismarck tomó las primeras medidas de seguridad social. La situación en aquel momento no era para bromear, los sindicatos ejercían gran presión sobre los políticos debido al descontento de los trabajadores; y el canciller decidió por ello crear un seguro médico, de accidente, de invalidez y de jubilación con el fin de calmar los humos.

Autonomía colectiva

Verdi Tarifverhandlungen
Conductores de autobús parados en StuttgartImagen: AP

El Estado fija, en primer lugar, las condiciones generales de trabajo. A continuación, los sindicatos y las empresas se sientan juntos para negociar, de forma autónoma, los convenios colectivos. Cuestiones como, por ejemplo, los salarios, la jornada laboral o los permisos y vacaciones. En el caso de que no lleguen a un acuerdo en alguna de las negociaciones, ambas partes pueden invitar a un tercer mediador imparcial. La Ley Fundamental garantiza la autonomía colectiva.

A su vez, los trabajadores tienen también el derecho de participar en las decisiones internas de las empresas. El Estatuto de las empresas regula el derecho de co-participación y co-gestión de los empleados a través de sus representantes, así como el derecho de información y consulta. Esto garantiza que los empleados estén representados en los consejos administrativos de las compañías y por ende, puedan participar en la toma de decisiones.

Los mayores sindicatos

Angela Merkel bei der DGB Michael Sommer
El presidente de DGB, Michael Sommer, con la canciller alemana Angela MerkelImagen: AP

La mayor organización sindical alemana es la Federación Alemana de Sindicatos (DGB). La DGB representa los intereses de ocho sindicatos. El mayor de ellos se llama ver.di, sindicato que representa los intereses de los trabajadores de servicios (tanto de empresas públicas como de privadas). Fundada en 2001, a través de la fusión de cinco sindicatos, ver.di representa al 35 % de los afiliados a la DGB, con unos 2,4 millones de trabajadores.

El segundo mayor sindicato es el IG Metal. En la actualidad, también con cerca de 2,4 millones de asociados. Su origen se remonta a 1891, fecha de la fundación del Sindicato de los Metalúrgicos. Aunque todavía es identificada como IG Metal, la organización aglutina hoy otras categorías, como la de los trabajadores de la industria textil y de la confección (desde 1998) y la industria de la madera y de los plásticos (desde 2000).

En último lugar, cabe destacar también la IG BCE que representa a trabajadores de los sectores de la minería, la química y la energía, entre otros, con unos 800.000 afiliados.

Organización patronal

IG Metall Urabstimmung
Una huelga sólo puede ser declarada después de votaciones en urnasImagen: AP

En cuanto a las empresas, ellas también poseen sus organizaciones representativas. Los empleadores alemanes están reunidos en asociaciones y federaciones según el principio de asociación industrial. La principal de ellas es la Confederación de las Asociaciones Patronales Alemanas (BDA). Esta institución representa a unos dos millones de empresas.

Otras organizaciones empresariales son la Asociación de las Cámaras de Comercio e Industria Alemanas (DIHK) y la Federación de Industrias Alemanas (BDI).

Financiación

Los sindicatos se financian básicamente con las contribuciones de sus miembros. Las cuotas de pago por ser miembro se sitúan alrededor del uno por ciento del salario bruto. La inversión de este capital en la economía general genera nuevos fondos adicionales que los sindicatos utilizan para financiar sus actividades.