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En El Salvador el aborto está penado en todos los casos. La prohibición absoluta lleva también a la criminalización de mujeres con partos prematuros extra-hospitalarios. Pueden ser condenadas por homicidio agravado a hasta 50 años de cárcel.
También, dijo que el Estado tiene la "obligación de garantizar a todas las mujeres juicios justos, libres de estereotipos de género, apegados al debido proceso".
El caso de Esme, nombre ficticio de una mujer condenada a 30 años por perder a su bebé tras una emergencia obstétrica, se suma a las condenas dictadas en El Salvador por abortos involuntarios.
En las últimas dos décadas, alrededor de 181 mujeres con emergencias obstétricas "fueron procesadas por aborto u homicidio agravado en El Salvador", según la Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto.
Cerca de 181 mujeres que experimentaron emergencias obstétricas "fueron procesadas por aborto u homicidio agravado en El Salvador", según ONG.