1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Jardineros aficionados en Leipzig: descanso y dedicación

15 de agosto de 2010

Miles de jardineros aficionados aprovechan el verano en su "Schrebergarten", sinónimo de descanso y dedicación de los alemanes. Leipzig, ciudad donde se originó el primer jardín de este tipo, alberga más de 30.000.

https://p.dw.com/p/OoIi
La idea del "Schrebergarten" se originó en 1869 en Leipzig.Imagen: DW

Con la frase "mi hogar es mi jardín" muchos alemanes convierten sus pequeños jardines o "Schrebergarten" en su domicilio durante el verano. Estos jardines, cuya idea inicial fue del pedagogo oriundo de Leipzig, Daniel Gottlob Moritz Schreber, en 1869, representan para los germanos una posibilidad de descansar y de evadir por unas semanas la ciudad. Tan sólo en Leipzig existen más de 30.000 parcelas, con una extensión total de alrededor de 960 hectáreas, y que representa el 30% de las zonas verdes de esta ciudad alemana ubicada al este de Berlín.

Jardineros aficionados cuidan todo el año sus oasis, que se encuentran en medio o a las afueras de las urbes. De acuerdo con las normas de las asociaciones de estos jardines, es obligatorio cultivar hierbas aromáticas, verduras y plantas ornamentales. Cada arrendatario -porque el terreno no se puede comprar- es responsable del cuidado de su jardín. Y también lo puede aprovechar para hacer barbacoas, poner una pequeña piscina inflable, y en el verano dormir en sus cabañas y disfrutar el buen tiempo con familiares, amigos y vecinos de parcela.


Schrebergarten in Hamburg Flash-Galerie
En un "Schrebergarten" existen normas muy estrictas sobre el uso de la tierra; por lo general se cultivan verduras y plantas ornamentales.Imagen: picture alliance/dpa

Descanso y cultivo de productos bio

"Mi jardín tiene una extensión de 250 metros cuadrados, de los cuales es obligatorio cultivar el 10% con verduras", dice Manfred Täuscher, un pensionado que desde hace 18 años posee un "Schrebergarten". En su huerta cultiva papas, tomates, zanahorias, entre otros. "Todo es bio, y la diferencia de estos productos con los del supermercado es abismal", comenta Täuscher. Por la limpieza de su jardín se asume que este jardinero aficionado le dedica muchas horas de trabajo y cuidado.

Manfred Täuscher y su esposa pasan la mayoría del verano en este jardín, cuyo grupo de parcelas tiene el nombre de "vista pacífica". Lo mismo hacen sus vecinos, algunos ya pensionados. Por 7.000 marcos alemanes Manni, como es conocido en esta colonia de jardines, adquirió en los años 90 este pedazo de tierra, que en ese entonces se asemejaba más a un desierto.

Schrebergarten Idylle
Los arrendatarios de este tipo de jardines son aficionados al cuidado de la naturaleza.Imagen: Made In Germany Filmproduktion, Köln

Torsten Kraft, uno de sus vecinos, cuida su jardín desde hace 11 años. Otro pensionado, Peter Erfurt, es jardinero aficionado desde hace 30. "Para poder hacer uso de este jardín tuve que esperar varios años en ese entonces en la antigua ex DDR". Su interés principal era poder disfrutar los fines de semana con sus hijos pequeños. "Aquí los niños pueden correr y jugar con otros niños todo el tiempo que quieran", dice Erfurt.

Jardines disponibles, pero no para hacer fiesta

En el año 2010 ya no es necesario esperar para adquirir un "Schrebergarten". En "vista pacífica" se encuentran varios disponibles de los 80 que hacen parte de esta colonia de jardines. Muchos de los nuevos usuarios son parejas entre los 30 y 35 años, una nueva generación. Sin embargo, los gustos y la idea de descanso difieren de las de Täuscher. "Cuando los jóvenes adquieren un jardín tienen que tener interés en cultivar verduras o sembrar plantas. Aquí no se trata solamente de diversión en zonas verdes y hacer fiestas", explica Täuscher. Este conflicto generacional parece por ahora no molestarle a él y a sus vecinos. Tampoco piensa dejar su jardín por nada en el mundo: "jardinero aficionado por siempre, hasta el último día", concluye.

Autor: Ronny Arnold / Cristina Mendoza Weber

Editora: Claudia Herrera Pahl