Impulso de la economía alemana
14 de agosto de 2006
La economía alemana ha dado una gran sorpresa. Pocos habrían apostado que la economía más debilitada de Europa registraría tal crecimiento en el 2006. Impulsada por las emociones del Mundial 2006 la economía registra éxitos inesperados. El fuerte impulso es mucho mayor de lo que osaron soñar los más optimistas. Durante el segundo trimestre la economía alemana registró un incremento del 0,9 por ciento, un crecimiento que no se registraba desde hace cinco años.
Los índices positivos han contagiado a los analistas que esperan que Alemania registre un crecimiento del 2 por ciento, como sucediera en el año 2000 del auge bursátil.
Los especialistas hacen hincapié en que a pesar de que las exportaciones alemanas continúan creciendo, el motor tras el actual crecimiento se encuentra en la demanda interna. La fortaleza económica ha impulsado la inversión privada. La industria de la construcción que desde hace 11 años se encontraba sumergida en una crisis registra un vuelco.
Peligrosa crisis en el Cercano Oriente
A pesar del efecto del Mundial 2006 que ha beneficiado al turismo en su totalidad, los productores de bebidas y el comercio al minorista, los expertos advierten en no caer en la euforia. Prevén que durante la segunda mitad del año la economía germana se vea duramente golpeada por una posible debilidad en las exportaciones. Si la economía mundial registra una ralentización los últimos meses del año, esto haría disminuir la demanda de la industria alemana.
Los conflictos en el Cercano Oriente y el consecuente incremento del precio del petróleo, hasta niveles que rondan los 80 dólares por barril, en las últimas semanas, amenazan la dinámica del mercado.
Más impuestos en 2007
Otro de los riesgos que tendrá que enfrentar la economía germana es el que se desprende del incremento del Impuesto al Valor Agregado a partir del 2007. En Alemania casi dos terceras partes del Producto Interno Bruto lo cubre el consumo privado. Es de esperarse que muchos ciudadanos alemanes compren coches, refrigeradores, muebles y otros bienes antes del incremento del IVA en el 2007, pero esto difícilmente podrá contrarrestar una previsible caída en de la demanda a partir del año entrante. De ahí que a pesar de la mejora de los índices económicos, los economistas prefieren calificarla de "coyuntural" y no esperan que la tendencia logre prolongarse por plazo.