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Golpes de pecho

18 de abril de 2003

UNESCO exige protección policial para la herencia cultural de Irak.Comerciantes suizos manifiestan la voluntad de no adquirir bienes culturales iraquíes. Falta aún un instrumento legal para impedir su comercio.

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Un civil iraquí llevándose un cuadro de un museo durante los saqueos en Bagdad.Imagen: AP

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha exhortado a la comunidad internacional a prohibir la importación de bienes culturales provenientes de Irak. El director general de la UNESCO, Koichiro Matsuura , declaró el jueves en París, al inaugurar la conferencia para la protección de la herencia cultural iraquí, que solicitará al Secretario General de Naciones Unidas, Kofi Annan, poner este tema a discusión en el Consejo de Seguridad. El objetivo es lograr una resolución acerca de adquisición y importación de tales bienes.

Las culpas se expían

Entre tanto, dos asesores culturales de la Casa Blanca dimitían a causa de la "destrucción sin sentido" del Museo Arqueológico de Bagdad. El saqueo se pudo haber prevenido, pues mientras las fuerzas militares se desplazaron "con extraordinaria precisión" para asegurar los pozos petrolíferos, falló la protección de la herencia cultural de Irak, escribió Martin Sullivan en su carta de renuncia a su cargo de principal asesor cultural de la George W. Bush. El secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, lamentó lo sucedido calificándolo de "cosa desafortunada que a nadie le gusta", y se cuidó de recalcar que "nadie permitió eso". Se ofrecerá recompensas a quienes devuelvan o den información del paradero de los tesoros prehistóricos robados, agregó.

150.000 objetos prehistóricos con valor de miles de millones de dólares fueron robados o destruidos durante el pillaje que siguió a la entrada de las tropas norteamericanas a Bagdad, según los cálculos de los expertos de la UNESCO. Entre los objetos robados hay joyas sumerias de unos 4.000 años de antigüedad, así como tablas con las primeras señales de escritura que datan de hace unos 5.000 años.

Suiza, el paraíso aduanero

Para resarcir mínimamente el latrocinio cometido contra el patrimonio cultural de Irak es imperativo crear instrumentos, pero nadie sabe a ciencia cierta cuáles ni cómo. Es de conocimiento público, por ejemplo, que uno de los principales mercados de arte ilegal se encuentra en Suiza. Motivo de ello es que este país alpino ofrece un marco legislativo y aduanero favorable al "lavado" de arte. Existe el libre bodegaje aduanero: mercancía, cuyo destino aún no está claro, puede ser depositada en bodegas de la aduana suiza sin pasar por control alguno.

Significa que si un coleccionista o comerciante compra un objeto creyendo en su origen legal, después de cinco años de poseerlo éste no puede ser reclamado.

El mercado ilegal ve, entonces, los cielos abiertos: cinco años se dejan los objetos en el limbo aduanero suizo, y luego se venden. La Unión Suiza de Anticuarios y Comerciantes de Arte está consciente del peligro que se avecina, sin embargo lo único que puede hacer es observar bien cada objeto que llegue al mercado, declaró su portavoz Jean-David Kahn. Sin embargo, la Unión no estaría a favor de una Ley Internacional de Transferencia de Objetos de Arte –es decir que un país pueda reclamar los objetos de arte que pertenezcan a su patrimonio cultural.

Lo que falta por hacer

El presidente de la UNESCO -apoyado por los 30 expertos internacionales reunidos hoy en París- ha exigido a los gobiernos de Washington y Londres la creación inmediata de una "Policía para la herencia cultural", y estableció un fondo especial para administrar las donaciones. Al parecer, la policía ya se encuentra en funciones y salvaguarda algunos sitios arqueológicos. Resta la creación del instrumento legal internacional. De lo contrario, toda la consternación demostrada por los políticos en el caso Irak, quedará sólo en golpes de pecho.