Galileo: la cara atractiva de Europa
28 de diciembre de 2005
Le Figaro, de París, comenta: "Como en el caso del reactor termonuclear ITER, pero a diferencia de lo que ocurre con Airbus o los cohetes Ariane, en la empresa de Galileo participa a fin de cuentas toda la Unión Europea ampliada. Aquí se desarrolla algo que, con el tiempo, podrá insuflar a la actualmente tan dubitativa Europa de los 25 la ambición de convertirse en algo más que un gran mercado. El programa de navegación satelital congrega a las principales empresas del ramo y seguramente acarreará también nuevos proyectos. Desde ya resulta atractivo más allá de Europa. China, la superpotencia del futuro, ya colabora y también Israel. Para Europa, ésta es la prueba de que tendrá una buena imagen a nivel mundial si Galileo logra opacar al sistema estadounidense GPS."
La enfermedad europea
La Libre Belgique, de Bruselas, apunta: "Galileo y sus infinitas posibilidades de aplicación: desde la medicina y la agricultura hasta el control de peajes en las autopistas. Europa aspira a ser el número 1 en el campo de la navegación satelital y desplazar al competidor estadounidense GPS al nivel de una brújula para niños exploradores. (...) Pero la medalla también tiene otra cara. Y ésta ha hecho rebrotar la enfermedad latente europea. (...) Francia demandó que la empresa tuviera su sede en Toulouse. Los alemanes quieren tener el centro de control en Baviera, los italianos..., los españoles... (...) Convertirse en el número 1 es una cosa, mantenerse en esa posición, otra."
El peligro iraní
En cuanto a las posibilidades de un golpe preventivo estadounidense contra Irán, el periódico Tagesspiegel, de Berlín, opina: "Se equivoca quien crea que los estrategas militares israelíes y estadounidenses sólo esperan que Teherán les ofrezca un pretexto para bombardear las instalaciones atómicas iraníes. A fin de cuentas, son ellos quienes que mejor saben cuán peligrosos pueden ser ya hoy los golpes de represalia iraníes. No obstante, a más tardar desde que el presidente de Irán lanzó sus amenazas de destrucción contra Israel, quedó en claro que tanto ese país como Estados Unidos asumirán probablemente ese riesgo, si no se consigue inducir a Teherán a renunciar a la bomba atómica por la vía política."