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Cuando trabajaba de enfermera Yeily Hernández no podía dar la atención médica adecuada a la gente enferma y veía morir pacientes por falta de medicamentos. La crisis económica que se vivía en Venezuela la llevó a emigrar a Colombia, la tierra de sus abuelos. Allí no se conformó con esperar a recibir ayuda sino a darla a quienes, como ella, empezaban desde cero lejos de su hogar.
Yeili Hernández trabajaba de enfermera en un centro de salud en su Venezuela natal. Atendiendo pacientes, percibía la grave crisis económica que se reflejaba, de manera directa, en el desabastecimiento de medicamentos e insumos médicos, pero también en la vida en general, con cortes de luz y la consecuente falta de agua. Era como "ir a la guerra sin balas” dice Yeily Hernández, recordando que a veces no había medicina ni para bajar la fiebre de los pacientes que acudían al dispensario. Un día renunció a su trabajo, hizo las maletas y emigró a Colombia. Con sus tres hijos y su esposo llegó en 2017 al barrio El Pozón de Cartagena. Rehacer su vida en la tierra de acogida no fue fácil, pero ella, gracias a su espíritu emprendedor, se convirtió en una de las lideresas más importantes de la ciudad caribeña. Es cofundadora e integra el Movimiento de Mujeres Lideresas Venezolanas en Cartagena. En Fuerza Latina nos cuenta cómo lo ha logrado.