1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Freud: ''la revelación del siglo XXI''

Cristina Papaleo7 de enero de 2006

El 6 de mayo se celebra el 150 aniversario del nacimiento del llamado ''padre del psicoanálisis''. Para sus detractores fue un charlatán. Para muchos otros, un gran pensador.

https://p.dw.com/p/7l58
¿Mente brillante o charlatán?Imagen: AP

La controversia en torno a la teoría psicoanalítica vuelve a encenderse en el año de Freud. En su ciudad natal de Pribor, en la actual República Checa,se lo homenajeará con un museo, y en Viena, ciudad en la que vivió desde los tres años, se preparan múltiples exposiciones, debates y conferencias acerca de su obra. Alrededor de 100 eventos a lo largo y a lo ancho del globo están previstos para que su obra se conozca mejor bajo el lema "La revelación del siglo XXI".

Aunque el legado de Freud al estudio de la psiquis humana sigue siendo tema de debate, es indiscutible que sus teorías sobre la agresividad, la sexualidad y la angustia son la base de todas las terapias psicológicas que hoy conocemos.

Stress - Migräne - Schlaf
Imagen: ZB

Quienes lo critican aseguran que sus teorías son un ‘producto del análisis de su personalidad’, y que logró vender una serie de conceptos llamativos detrás de los cuales no hay una base científica sustentable. Sin embargo, es innegable que Freud, al adentrarse en el terreno del inconsciente, sentó las bases de la psicología actual.

Una arqueología del alma

El yo, el ello y el súper yo: estos son los fundamentos del edificio teórico de Freud, y se han grabado tan profundamente en lo que Jung, uno de sus discípulos, llamó el inconsciente colectivo que hoy la exploración de la psiquis humana sería impensable sin ellos.

El médico Freud, que no encontró respuestas a los misterios del alma humana en la ciencia de su época, se volcó a investigar una zona en penumbras: el inconsciente. ¿Qué fuerza desconocida hacía ver alucinaciones a los enfermos? ¿Qué llevaba al hombre a comportarse contrariando las reglas de la cultura, y que lo hacía, al mismo tiempo, desear formar parte de esa cultura costara lo que costara?

Freud se empeñó como ningún otro médico de entonces en poder entender los mecanismos del comportamiento humano, y supo que eso no sería posible utilizando las técnicas de su época. Así fue que sacó a los locos de los manicomios y los rehumanizó llevándolos al diván y haciendo comprender a la sociedad que había más dentro del hombre que el mero cerebro en formol de la facultad de medicina.

Die Couch von Sigmund Freud
El diván de Freud, en el Museo de la Biblioteca Nacional en Washington, EE.UU.Imagen: AP

De este modo descubrió la importancia de dejar hablar a sus pacientes sobre lo que los aquejaba, y colocó, con el primer famoso caso de Anna O. junto a su colega Josef Breuer, la piedra fundamental del psicoanálisis: el relato y la asociación de ideas. Todo lo contado por el paciente cobró importancia y se transformó en material de interpretación.

Hablemos de sexo

También hay un antes y un después de Freud en cuanto a poner la sexualidad humana sobre el tapete. Su contribución acerca del principio del placer, el complejo de Edipo y la sexualidad infantil influenció a filósofos como Michel Foucault y antropólogos como Margaret Mead. La sociología del siglo XX tampoco escapa a la influencia del pensamiento del médico vienés, ya que con su aporte a la destabuización de la sexualidad contribuyó también a una mayor comprensión y desarrollo de las relaciones sociales.

Szenenbild Von Suchen und finden der Liebe
Imagen: Constantin Film

Criticado durante los años 50 por haberle dado ‘excesiva importancia’ a lo sexual, Freud nos recuerda que ‘no somos dueños de nosotros mismos’, y con esto lanza la primera mirada sobre lo que muchos se niegan a ver: la propia vulnerabilidad y las propias falencias.

En aquellos años revivían las posturas biológicas y comenzaban a recetarse los primeros psicofármacos. Un velo de represión volvía a caer sobre la humanidad y era una época en la que se debía ante todo, funcionar bien. De hecho, el concepto de sexualidad de Freud es mucho más amplio que el que hoy conocemos. Se trata de la energía sexual como energía vital, Eros, siempre en pugna con el instinto de muerte, Tánatos.

Freud de entrecasa

¿Quién era Freud? En principio, un pesimista que veía al hombre como un animal que desea, en conflicto con su familia, con la sociedad y consigo mismo. Hijo de un comerciante de lanas empobrecido, nunca utilizaba su nombre judío, Sigismund Schlomo. Se decía ateo. A los 30 años se casó con Martha Bernays, una muchacha de buena familia, y tuvo seis hijos. De su experiencia analítica y la dedicación a sus pacientes comenzó a desarrollar sus teorías psicológicas. Fue un fumador compulsivo y enfermó de cáncer de paladar en 1920. Sus libros fueron quemados por los nazis en 1933. Murió el 23 de septiembre de 1939 en Londres siendo una personalidad famosa y respetada.

Anna Freud
Anna Freud, su hija, se dedicó al psicoanálisis infantil.Imagen: dpa

El arte y el psicoanálisis

Inspirador de corrientes artísticas como el surrealismo, con su ‘Intepretación de los Sueños’ el discurso de Freud no se queda en el campo científico, sino que abarca un sinfín de manifestaciones humanas incomprensibles y abre un pasadizo secreto hacia fenómenos que la ciencia aún hoy no es capaz de explicar fehacientemente: la intuición, las casualidades (el ‘azar objetivo' de los surrealistas), la telepatía, la videncia. Su influencia se ve también en la literatura de André Gide, D.H. Lawrence y Thomas Mann, y en las obras de cineastas como Alfred Hitchcock y Woody Allen. Fue sin duda una mente brillante abriendo caminos que aún no se han terminado de explorar.

Magritte Ausstellung in Paris
L'homme au chapeau melon" de René Magritte, pintor surrealista.Imagen: AP