El poder de las distopías en el cine
Son muchos los que vuelven a ver la película “V de Vendetta” cada 5 de noviembre. Como otras películas o series distópicas, no suele dejar al público indiferente.
V de Vendetta
Cada año, cinéfilos de todo el mundo rememoran las palabras del misterioso “V”, que pretende explosionar el Parlamento de un Reino Unido totalitario en nombre de la libertad: “Recuerda, recuerda, el 5 de noviembre…” Inspirado en la película, el polémico movimiento Anonymous adoptó como símbolo su icónica máscara.
Fahrenheit 451
La exitosa novela de Ray Bradbury de 1953 saltó a la gran pantalla en 1966 y luego de nuevo este 2018. La obra describe una supuesta sociedad estadounidense del futuro en la que los libros están prohibidos y son quemados si son descubiertos. El arte y la creatividad siempre han estado en el punto de mira de quienes son alérgicos a las libertades humanas.
Black Mirror
La popular serie británica ha llevado a los televisores y ordenadores de todo el mundo los miedos de muchos sobre los peligros de un uso inapropiado de la innovación científica y el mundo digital. Aunque hay quien afirma que esta distopía tecnológica no está lejos de ser una realidad.
El cuento de la criada
La novela de Margaret Atwood ha experimentado un renacer a partir de la adaptación televisiva que vio la luz en 2017 y que va camino de una tercera temporada. Su éxito ha ido de la mano de la mayor visibilidad que ha adquirido en los últimos años la lucha feminista, pues la serie muestra cómo la tecnología podría utilizarse contra las clases bajas, y en especial contra las mujeres.
1984
El clásico de los clásicos. La obra de George Orwell ha sido adaptada a numerosos formatos, incluso a la ópera. Es considerado uno de los libros más influyentes del siglo XX. La manipulación de la información, la vigilancia masiva y la represión política y social son algunos de los elementos más característicos de la ficción orwelliana. ¿Y quizás de la sociedad presente, o de un futuro cercano?
El proceso
Orson Welles fue el encargado de llevar a la gran pantalla el universo kafkiano de esta ficción, y no hay quien duda que regaló al mundo una obra maestra. Los años pasan, pero la reflexión en torno a la problemática de la alienación del hombre y la deshumanización de los sistemas políticos no ha perdido actualidad.
Metrópolis
Fritz Lang no necesitó de sonido para hacer una de las películas más importantes de la historia del cine alemán, que además fue el primer filme en ser considerado Memoria del Mundo por la Unesco. Esta obra de 1927 sitúa su futuro distópico en 2026. Así que quedan ocho años para ver si el mundo acaba por parecerse a la imaginación del cineasta.
Matrix
Aunque para muchos se trata de una trilogía icónica de los géneros de ciencia ficción y aventura, lo cierto es que las implicaciones políticas de Matrix obligan a entenderla también como una distopía. Y ahora que la inteligencia artificial está a la orden del día, no son pocos los que vuelven a estas películas para dar respuesta a los interrogantes morales que este asunto plantea.