Los aficionados a la cocina tradicional no pueden prescindir de él: el batán, un utensilio de piedra para moler alimentos que consta de dos piedras, una grande plana y otra de base curva. Ninguna salsa o ají triturada en una licuadora sabe mejor que molido en esta piedra ancestral.
Su uso se pierde en la prehistoria y, aunque la tradición se va perdiendo, las picanteras de arequipa se encargan de salvaguardar esta técnica ancestral.