1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

El "arte" de expoliar arte

20 de enero de 2003

Parecía imposible que Etiopía recuperara el obelisco de Axum que robó Mussolini. Museos como el Pompidou de París o el Metropolitan de Nueva York están devolviendo obras a sus dueños. ¿Y el arte precolombino?

https://p.dw.com/p/3BlK
"La tentación de San Antonio", obra robada por los nazis en Holanda y recientemente devuelta a sus propietarios en Nueva York.Imagen: AP
También parece imposible que los mármoles del Partenón puedan regresar a Atenas para las Olimpiadas del 2004 o que México recupere el Penacho de Moctezuma, expuesto en el Museo Etnológico de Viena, pero la reclamación persiste. Los dos museos son legítimos propietarios de las piezas citadas y escudan sus negativas en que la devolución podría provocar una avalancha de reclamaciones que vaciarían los museos occidentales, nutridos en la época del colonialismo. En este sentido, las reclamaciones históricas sólo podrían ser resueltas mediante un gesto de buena voluntad por parte de los gobiernos.

El problema más acuciante, sin embargo, en el expolio patrimonial que sufren actualmente los países del Tercer Mundo. La emergencia del arte primitivo ha hecho que Centroamérica, el África Negra o el Sudeste Asiático sean objeto de un pillaje sistemático por parte de saqueadores que venden a Occidente valiosas piezas de sus culturas. La magnitud de dicho expolio movió a la Unesco a declarar el 2002 Año del Patrimonio Cultural y a alentar la cooperación internacional para eliminar el comercio ilícito de antigüedades. En 1995 Unidroit promovió un convenio internacional que complementaba la convención de 1970 sobre tráfico ilícito de obras de arte. El convenio no era retroactivo, de modo que los países firmantes sólo se comprometen a la devolución de piezas robadas a partir de esta fecha.

Penacho de Moctezuma

El director del Museo Nacional de Antropología de Ciudad de México, Felipe Solís Olguín, solicitó el año pasado la devolución por parte de Austria del penacho de Moctezuma: "Está en el contexto de las negociaciones que está llevando a cabo el gobierno de México. Esperamos que Austria tenga un gesto, como lo tuvo el Papa Juan Pablo II, que en uno de sus viajes devolvió a México el Códice Badiano -herbolario indígena-, un libro que tenía en la biblioteca del Vaticano y que ahora se encuentra en el Instituto Nacional de Antropología e Historia. Para nosotros el Penacho tiene un gran valor emotivo y un enorme poder simbólico", concluye. Cabe añadir que el Penacho de Moctezuma fue una de las 158 piezas que el caudillo azteca regaló al conquistador Hernán Cortés, en calidad de "visitante de honor". Datada entre 1325 y 1521, por sus características es una pieza singular de la cultura azteca, que se exhibe en el Museo Etnológico de la antigua capital imperial austríaca y que hoy aún reposa allí, como lo confirmó a DW-WORLD Lino Santacruz Moctezuma, jefe de prensa de la Embajada de México en Alemania.

Los Mármoles del Partenón

Expuestos en el British Museum y hasta la manera en que fueron sustraídos de Atenas es motivo de polémica. Algunas versiones apuntan a que Thomas Bruce, conde de Elgin, militar, diplomático y arqueólogo, durante la época del imperio otomano extrajo el friso de las ruinas del Partenón con la aprobación de las autoridades. No obstante, se especula que para conseguirlo sobornó a los funcionarios locales. Los defensores de Elgin argumentan que, de no haber sido extraídos, hubieran sido destruidos durante la guerra de Independencia o en las que sobrevinieron. Sin embargo, otros denuncian los daños que sufrieron los mármoles durante su transporte a Inglaterra -en un largo periplo por Alejandría, Esmirna, Siria y Malta- y responsabilizan a Elgin de haber cortado por la mitad algunas esculturas para facilitar el transporte. La colección completa fue comprada en 1816 por el gobierno británico y confiada al Museo Británico para su conservación. Grecia está aprovechando la organización de los Juegos Oímpicos como argumento para el retorno de estas piezas, y ya ha presupuestado la creación de un museo para colocar los mármoles de Elgin.

Dios guatemalteco en España

El Gobierno de Guatemala reclama al Museo Barbier-Mueller en el Palau Nadal de Barcelona la devolución de la máscara funeraria de fucsita valorada en 11 millones de euros y que data de entre los años 400 y 500 d.C. La máscara funeraria representa al dios solar Kinich Ahau. Guatemala alega que fue fruto de un saqueo de tumbas en Río Azul.

Botín troyano robado a Alemania

Las supuestas joyas de Helena de Troya, también conocidas por el tesoro de Príamo -aunque ambas denominaciones se hayan demostrado históricamente falsas- constituyen uno de los capítulos más rocambolescos de la arqueología. Heinrich Schliemann, el visionario alemán que localizó y excavó la Troya de la Ilíada, además de Micenas, reunió un fabuloso tesoro -con la "máscara de Agamenón" en oro incluida- que acabó donando a un museo de Berlín. El Ejército Rojo, tras tomar la capital del III Reich, se llevó dichas joyas, junto a otros tesoros, como botín de guerra a Moscú, donde todavía permanecen. A pesar de las reclamaciones alemanas -aunque Grecia y Turquía también tendrían algo que decir- la Duma votó hace pocos años que ni esa ni otras requisas jamás serían devueltas, como compensación por los sufrimientos de una guerra que costó la vida a 20 millones de rusos.