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Galápagos: Contra la basura oceánica

31 de enero de 2020

Las Islas Galápagos son reconocidas hoy como el destino turístico más sustentable del mundo, por los esfuerzos mancomunados de la sociedad civil, científica y gubernamental. El archipiélago libra una batalla contra el plástico oceánico. Los residuos, principalmente de Asia, llegan impulsados por cuatro corrientes marinas.

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La basura oceánica amenaza a las Galápagos. Residuos provenientes de la cuenca del Pacífico, principalmente de Asia, llegan diariamente a sus costas poniendo en peligro la vida de su flora y fauna. Desde plástico que se degrada en microplásticos e ingresan en la cadena alimenticia de los animales y humanos, hasta envases o residuos que pueden ser transporte de especies depredadoras. La sociedad civil es consciente de la problemática y se ha organizado para proteger a Galápagos y ayudar a las autoridades científicas y gubernamentales a cumplir las metas propuestas. Mantener el plástico a raya y transitar el cambio hacia una cultura ecológica. Iniciativas ciudadanas como el "Frente Insular" buscan sobre todo, concientizar a los galapagueños y al mundo del flagelo. El Parque Nacional Galápagos, junto a organismos como el Instituto Darwin, realiza desde el diagnóstico y registro de las especies de la flora y fauna de Galápagos, hasta la evaluación del impacto que la contaminación oceánica por plástico representa para las especies del archipiélago ecuatoriano. El pronóstico no es alentador. La Municipalidad de la Isla Santa Cruz, donde vive la gran mayoría de la población, trabaja en un nuevo modelo de separación y manejo de los residuos. Pero pese a los esfuerzos, Galápagos no puede reciclar su basura, debido a la falta de recursos y tecnología. Aún así, el esfuerzo mancomunado de todos los actores, han posibilitado que las islas Galápagos sean reconocidas como "el destino turístico más sustentable del mundo", por un aeropuerto ejemplar en el mundo, la conservación de sus especies y la convivencia humana con la vida silvestre. Pero las Galápagos no pueden seguir esta lucha en solitario. El gobierno del Ecuador lanza un llamado de conciencia internacional para evitar que las Galápagos, patrimonio natural de la humanidad de la UNESCO, siga siendo contaminado.