Deportistas de élite infectados por VIH
Algunos atletas destacados murieron a causa de la enfermedad del sida. Otros, como las superestrellas estadounidenses Earvin "Magic" Johnson y Greg Louganis han estado conviviendo con el virus por tres décadas.
Tom Waddell, fundador de los Juegos Gay
En 1968, el decatleta estadounidense compitió en los Juegos Olímpicos de México y quedó sexto. Estudió medicina y se hizo médico. En 1982, Waddell, que es abiertamente gay, organizó los primeros Juegos Gay en San Francisco, como un evento deportivo libre de homofobia. En 1985, le diagnosticaron sida. En 1987, murió a causa de la enfermedad a la edad de 49 años.
Michael Westphal: la muerte secreta por sida
En la década de 1980, Westphal era uno de los mejores tenistas alemanes profesionales. Llegó a la final de la Copa Davis junto a Boris Becker en 1985. Alemania perdió. Más tarde, Westphal enferma de una "misteriosa enfermedad viral". Así se dijo oficialmente. En 1991, a la edad de 26 años, murió de sida a consecuencia de una aventura amorosa, como reveló su novia de entonces 10 años después.
"Magic" Johnson, el rostro de la lucha contra el VIH
Cuando la superestrella del baloncesto hizo pública su infección por VIH en 1991, una onda expansiva recorrió el deporte. Parecía el final de la carrera de Earvin "Magic" Johnson, aunque en 1992 regresó y ganó el oro olímpico en Barcelona con el "Dream Team" de Estados Unidos. Hasta la fecha, Johnson no ha contraído sida. A sus 65 años, sigue comprometido en la ayuda a personas infectadas.
Arthur Ashe, infectado por una transfusión
En 1975, Ashe se convirtió en el primer tenista profesional negro en ganar Wimbledon, el torneo más prestigioso del mundo. El estadounidense había ganado ya el Abierto de Australia y el de Estados Unidos y fue número uno en el ranking mundial. En 1983, Ashe recibió una transfusión de sangre contaminada con VIH tras una cirugía cardíaca. En 1992, anunció que tenía sida y un año después murió.
John Curry, exclusiva del diario "Bild"
Con su estilo artístico, Curry deleitó a los aficionados y revolucionó el patinaje artístico. En 1976, el británico se proclamó campeón de Europa, luego del mundo y finalmente ganó el oro en las Olimpíadas de Innsbruck. Antes del Mundial, el tabloide alemán "Bild" reportó que era gay. A finales de 1987, le diagnosticaron infección por VIH. En 1994, a la edad de 44 años, Curry sucumbió al sida.
Greg Louganis: doble oro a pesar del diagnóstico
En los Juegos Olímpicos de 1984 en Los Ángeles y 1988 en Seúl, Louganis ganó dos oros: en clavados de altura y en los 3 metros. En 1994, la superestrella estadounidense hizo público que era gay y que ya se había infectado por el VIH antes de Seúl. A día de hoy, el deportista de 64 años no ha contraído el sida. Louganis lleva 30 años implicado en la lucha contra la enfermedad.
Rudy Galindo, al cuidado de su hermano con sida
Galindo, nacido en 1969, se enfrentó al sida en varias ocasiones. Este patinador artístico estadounidense de raíces mexicanas cuidó de su hermano enfermo hasta su muerte en 1994. Dos de sus entrenadores también murieron de sida. En 1996, fue campeón de Estados Unidos y quedó tercero del mundo antes de retirarse. Ese año hizo pública su homosexualidad y en 2000 anunció que era seropositivo.
Gareth Thomas, vivir con el secreto durante años
Thomas disputó en su carrera 100 partidos con la selección galesa de rugby, a veces como capitán. A finales de 2009, se convirtió en el primer jugador profesional de rugby del mundo en revelar públicamente su homosexualidad. En 2019, confesó que estaba infectado por el VIH: "Viví con este secreto durante años. Me sentía avergonzado. Guardar un secreto tan grande me pasó factura". (lgc/rr)