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Costo de vacunas, carga para países emergentes como Colombia

Thomas Kohlmann
23 de marzo de 2021

Con más de 62.000 muertos, Colombia se vio especialmente afectada por el coronavirus. Ahora, el país está gastando mucho para financiar suficientes vacunas. En Sudáfrica, la situación es igualmente tensa.

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Una anciana es vacunada con la vacuna china Sinovac en Medellín, Colombia.
Una anciana es vacunada con la vacuna china Sinovac en Medellín, Colombia.Imagen: Joaquin Sarmiento/AFP/Getty Images

Colombia y Sudáfrica son considerados por el Banco Mundial como "países de ingresos medios". Con un ingreso nacional bruto per cápita de 6.510 y 6.040 dólares respectivamente (2019), no cuentan como países pobres, pero tampoco están entre los más ricos del mundo. Ambos países se han visto muy afectados por la pandemia del coronavirus y ahora tienen que hacer cola detrás de una gran cantidad de países más ricos para comprar las vacunas mundialmente codiciadas e inmunizar a sus poblaciones. Ambos países han comprado tanto la vacuna más barata de AstraZeneca como la más cara de Moderna.

Con un presupuesto sanitario anual de apenas 10.000 millones de dólares para una población de unos 50 millones de habitantes, Colombia es uno de los muchos países que tienen dificultades para hacer frente a los costos de las vacunas. A Sudáfrica le va un poco mejor, ya que el miembro del G20, con casi 60 millones de habitantes, gastó unos 30.000 millones de dólares en 2018. Sin embargo, al igual que en el caso de Colombia, no fue nada fácil para Sudáfrica negociar buenas condiciones con los fabricantes de vacunas. Ambos gobiernos tienen presupuestos limitados para comprar vacunas y ambos no tienen derecho, o tienen un derecho muy limitado, al suministro de vacunas en el marco de la iniciativa COVAX.

Demasiado ricos para COVAX

Debido a que las economías emergentes no cuentan con los recursos financieros y la capacidad de producción de países industralizados como Estados Unidos, Reino Unido, Rusia o China, los países de renta media necesitan desesperadamente vacunas para reactivar sus economías y escapar de la pandemia, a pesar de los presupuestos sanitarios extremadamente ajustados.

Países como Colombia "están entre la espada y la pared", dice Carolina Gómez, cofundadora de la iniciativa Centro de Pensamiento Medicamentos, Información y Poder de la Universidad Nacional de Colombia, que aboga por un amplio acceso a las medicinas y a las terapias modernas. "No tienen más remedio que someterse a lo que digan las compañías farmacéuticas", criticó en una entrevista con la agencia de noticias Bloomberg.

Las primeras dosis de vacuna llegan a Johannesburgo, Sudáfrica, el 1 de febrero de 2021.
Las primeras dosis de vacuna llegan a Johannesburgo, Sudáfrica, el 1 de febrero de 2021.Imagen: via REUTERS

Mala posición negociadora

La iniciativa mundial COVAX, cuyo objetivo es que las vacunas estén disponibles en todo el mundo, ayuda a los países pobres a conseguirlas y les proporciona dosis financiadas por donantes. Sin embargo, el presupuesto de COVAX no es ni de lejos suficiente para abastecer a países como Colombia para vacunar a la mayoría de su población. De este modo, millones de colombianos se verán afectados.

Por ello, Colombia ha firmado acuerdos de suministro directo con Pfizer/BioNTech, Moderna, AstraZeneca, Johnson & Johnson y la empresa farmacéutica china Sinovac para obtener suficientes vacunas, además de los suministros a través del programa COVAX. El país acordó comprar 10 millones de dosis de Pfizer/BioNTech por 12 dólares cada una, según los documentos del contrato.

De acuerdo con los documentos del ministerio de Economía citados por los investigadores de la Universidad Javeriana de Bogotá, el Gobierno colombiano tendrá que pagar unos 295 millones de dólares por 10 millones de dosis de Moderna, lo que equivale a casi 30 dólares por dosis. Sin embargo, esto puede incluir los costos de transporte y logística. El costo por 20 millones de dosis a través del programa COVAX es de unos 225 millones de dólares, según los investigadores, incluyendo también los costos de transporte. Sin embargo, no queda claro cuál es el precio por dosis, porque no se puede obtener información más precisa de fuentes oficiales en Colombia.

Según el gigante farmacéutico estadounidense Pfizer, los países de ingresos altos y medios deben pagar más que los de ingresos bajos por cada dosis de vacuna, pero aún así tendrían que pagar mucho menos que cuando se iniciaron las entregas de vacunas a finales de 2020. Pfizer ha afirmado en repetidas ocasiones que no quiere beneficiarse del negocio con los países más pobres. Sin embargo, Moderna guarda un llamativo silencio en cuanto a la cantidad que tiene que pagar cada país por cada dosis de vacuna. 

Más impuestos, menos gasto público

En Colombia se han registrado 2,3 millones de casos de COVID-19, es decir, aproximadamente dos de cada 100 infecciones en todo el mundo. Desde hace meses se aplican restricciones más estrictas, especialmente en las principales ciudades del país, lo que supone una presión adicional para la recuperación económica. El país se encuentra en la contracción económica más profunda de su historia, y el gobierno está planeando aumentos de impuestos y recortes de gastos.

Países como Colombia y Sudáfrica se enfrentan a un dilema, afirma Anna Bezruki, del Centro de Salud Global de Ginebra. El elevado costo de la vacuna está provocando una escasez de dinero para otras áreas de salud pública.

Otros países latinoamericanos, como Argentina y Perú, también están en peligro, comenta Thomas Bollyky, director del programa de salud global del grupo de expertos estadounidense Council on Foreign Relations (CFR). Los países de ingresos medios -excluida China- representaron casi la mitad de los casos de coronavirus en el mundo en febrero, pero solo el 17 por ciento de las dosis de vacunas administradas, según un informe de la iniciativa del CFR.

(ct/ers)